El frenesí diplomático por contener la respuesta israelí al ataque de Irán del pasado sábado se materializó ayer en la visita de los ministros de Exteriores de dos de sus principales valedores mundiales: Alemania y el Reino Unido, país que le ayudó a interceptar los drones y misiles lanzados por Teherán. Annalena Baerbock y David Cameron se reunieron por separado con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y con el presidente, Isaac Herzog. “Tienen todo tipo de sugerencias y consejos, y lo agradezco. Pero quiero aclarar que nosotros mismos tomaremos las decisiones y el Estado de Israel hará todo lo que resulte necesario para defenderse”, dijo Netanyahu al Consejo de Ministros, tras los encuentros.
David Cameron admitió tras entrevistarse con el presidente Herzog que “está claro que los israelíes han tomado la decisión de actuar” y manifestó su esperanza de que lo hagan “de una forma que escale [la tensión] lo menos posible”.
Por su parte, Netanyahu agradeció a los ministros de por sus aportes, pero dijo que Israel tomaría sus propias decisiones en materia de seguridad. “Nuestros aliados tienen todo tipo de sugerencias y consejos. Lo aprecio, pero quiero dejarlo claro: tomaremos nuestras propias decisiones y el Estado de Israel hará todo lo necesario para defenderse”, dijo.
El primer ministro simplemente aseguró a los países del Golfo y a Jordania que Israel haría todo lo posible en caso de un ataque contra Irán para evitar poner en peligro los regímenes de estos Estados, mientras el rey Abdallah de Jordania advirtió que su país “no será una arena para una guerra regional”.
La ministra alemana Baerbock dijo en el aeropuerto de Ben Gurion, cerca de Tel Aviv, que dejó claro durante las conversaciones en Israel con Benjamin Netanyahu que “no se debe permitir que Oriente Medio caiga en una situación cuyo resultado es completamente impredecible”.
“Porque eso no serviría a nadie”, dijo. “Ni a la seguridad de Israel, ni a las muchas docenas de rehenes, que aún están en manos de Hamás. Ni la sufrida población de Gaza, ni las muchas personas en Irán, que están sufriendo bajo el régimen. Ni los terceros países de la región, que simplemente quieren vivir en paz”, dijo la ministra alemana, un país con el que Israel tiene relaciones próximas.
“Ahora todos deben actuar con prudencia y responsabilidad. No hablo de ceder. Hablo de una sabia moderación, que es nada menos que fuerza”, cerró Gurion.
Hezbollah ataca en la frontera con el Líbano
Al menos 18 personas resultaron heridas ayer tras el impacto de un presunto dron lanzado desde Líbano en un centro comunitario de la aldea Arab al-Aramshe, situada en la frontera norte. Las fuerzas armadas y los servicios médicos confirmaron el incidente, que suscitó preocupaciones sobre una escalada en las tensiones en la región.
Hezbollah se adjudicó la autoría del atentado, que tenía como blanco, según sus declaraciones, una instalación utilizada por el ejército israelí. La Fuerzas de Defensa Israelí (FDI) informaron que 14 de los 18 heridos son soldados, mientras que seis se encuentran en estado grave, dos muestran heridas leves y otros dos están fuera de peligro.
Una de las víctimas civiles está en estado crítico, mientras que los otros recibieron atención por heridas de diversa consideración. Hezbollah, respaldado por Irán, dijo que lanzó el ataque en respuesta a los ataques que mataron a tres combatientes de su grupo el martes.