El juez federal de San Carlos de Bariloche, Leónidas Moldes, procesó en las últimas horas a los cinco prefectos involucrados en el asesinato de Rafael Nahuel, el joven mapuche que murió tras ser baleado por la espalda en el marco de un desalojo realizado por la Agrupación Albatros, perteneciente a la Prefectura Naval. El magistrado consideró que los prefectos Francisco Pintos, Juan Obregón, Sergio García, Sergio Cavia, Carlos Sosa incurrieron en el delito de homicidio agravado cometido con exceso en la legítima defensa.
Por un lado, Moldes interpretó que la muerte del joven sucedió en el marco de un enfrentamiento. Por eso también fueron procesados Fausto Jones Huala y Lautaro González, los dos compañeros de Nahuel que trasladaron su cuerpo desde donde fue herido hasta la ruta, por considerarlos responsables de usurpación y atentado a la autoridad. “A mi modo de ver, los nombrados pudieron razonablemente imaginar que su vida y la de sus compañeros estaban en peligro”, afirmó el juez federal.
De esta manera, para el magistrado, los prefectos se encontraron en la “necesidad de defenderse de alguna forma”. De todas formas, Moldes terminó procesándolos por considerar que “pudieron haber rebasado el límite de la necesidad: emplearon un fusil MP5 y sus pistolas reglamentarias”. Finalmente, el juez elevó la causa a juicio oral y postuló que el “debate debe llegar cuanto antes”.
