Horas después de su presentación oficial como candidato, la Justicia Electoral Provincial habilitó ayer a Martín Llaryora a participar en las elecciones municipales de nuestra ciudad, que se llevarán a cabo el 12 de mayo. De cualquier manera, la disputa está lejos de finalizar, ya que se espera que más temprano que tarde, tanto la Unión Cívica Radical (UCR) como el Frente Cívico, apelen la decisión y lleven el caso ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
En la resolución firmada por la jueza Marta Vidal, que revoca lo dispuesto por la Justicia Electoral Municipal, se indicó que “el candidato Llaryora posee residencia continua e inmediata a la elección desde el año 2014 en que alquiló por primera vez en Córdoba hasta la fecha, la que no se encuentra interrumpida”. Vidal señaló además que la Junta Electoral Municipal “al desconocer la existencia y eficacia probatoria de los contratos de locación de inmueble a nombre de Llaryora… privó de la prueba fundamental para demostrar la residencia del candidato impugnado”.
“El candidato posee un nexo de conocimiento con el electorado de la ciudad y no sólo una relación ‘de asiento’, más allá del domicilio que figuraba en su documento, en la ciudad de San Francisco, donde reside su grupo familiar… empero posee residencia continua e inmediata a la elección del 12 de mayo, desde el año 2014 en que alquiló por primera vez en la capital de Córdoba, la que no se encuentra interrumpida”, expresa la resolución. Al conocerse la medida, el candidato a intendente por Córdoba Cambia, Luis Juez, criticó la resolución a través de su cuenta de Twitter. «No esperábamos otra cosa, hace 20 años que la Agencia Córdoba Justicia trabaja para los intereses del poder”, denunció.
Diametralmente opuesta fue la reacción de Rodrigo de Loredo, candidato de la UCR, quien el miércoles último, en el lanzamiento de su candidatura, evitó polemizar al sostener que “ojalá cumpla con todos los requisitos y pueda competir para darle otra opción al electorado”. “Más que un problema de papeles, me preocupa que no conozca la ciudad”, indicó el postulante radical, que remarcó que Llaryora debe cumplir la ley “como cualquier vecino”. De cualquier manera, el caso derivará en el TSJ que será el encargado de resolver si Llaryora puede o no competir.
“Córdoba tiene que estar en lo más alto”
Aunque su candidatura todavía debe sortear una instancia judicial, Martín Llaryora comenzó ayer la carrera hacia el Palacio 6 de Julio. Por primera vez, el vicegobernador en uso de licencia, se presentó en sociedad como aspirante a la intendencia de esta ciudad, en un acto que contó con la presencia del gobernador y candidato a la reelección, Juan Schiaretti, en un gesto claro para apuntalar la idea de trabajo en equipo entre la Provincia y la Municipalidad.
Acompañado por Daniel Passerini, candidato a viceintendente, Llaryora se encargó de remarcar su rol de gestor y administrador porque “Córdoba tiene que estar en lo más alto”. En las propuestas de campaña, señaló que reducirá en un 25% la planta política de la Municipalidad, llevará cloacas a Villa El Libertador, mejorara el servicio de transporte urbano de pasajeros y colocara 1.000 cámaras de seguridad. Además, también se encargó de tirarle primer “dardo” a la gestión radical al sostener que tras la gestión de Rubén Américo Martí “todo se paró”.
Además, se comprometió a luchar contra el narcotráfico y a crear “por lo menos cuatro centros en la capital para tratar a los enfermos y sacarlos del infierno de la droga y volverlos a ruta y el sendero del progreso”. A su turno, Passerini prometió cerrar el zoológico, devolver los animales y crear un hospital municipal veterinario, además de trabajar en conjunto con el área de salud provincial.