Tras un primer semestre marcado por la poca actividad, el Congreso de la Nación entró esta semana en un receso invernal que se extenderá hasta el 5 de agosto. De todas maneras, por su proximidad con las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, se espera que los legisladores del Senado de la Nación y de la Cámara de Diputados retomen sus tareas recién después del 11 agosto.
La intención es que, a partir de ese período y durante los meses que quedan del año, la situación en el Parlamento se revierta, en especial por la expectativa que tiene la Casa Rosada respecto de una serie de proyectos de ley claves. Entre ellos figura, sin duda, el presupuesto de 2020.
Pese a que el Ejecutivo tiene plazo hasta el 15 de septiembre para enviar la iniciativa a la Cámara Baja, se prevé un debate complicado por el año electoral, porque será el último presupuesto de la gestión y porque está abierta la posibilidad de un cambio de gobierno. Cabe recordar que, a principios de mes, el Ministerio de Hacienda envió un anticipo del proyecto a Diputados en el que proyectó una inflación de 26,1% para diciembre de 2020 y un crecimiento de 3,5% del Producto Bruto Interno (PBI).
Por otro lado, la Cámara Baja podría retomar el debate sobre la llamada Ley de Góndolas, que ya tiene dictamen de comisión, pero no fue sometida a votación en el recinto por las diferencias que persisten entre el oficialismo y la oposición. El dictamen de mayoría es el de la oposición y establece que una misma marca no puede acaparar más del 30% de la góndola del supermercado. Si bien el objetivo es combatir casos de abuso de posición dominante, en la bancada de Juntos por el Cambio hay reparos con ese límite.
Mientras tanto, en el Senado espera debatir el proyecto del nuevo Código Procesal Penal, una prioridad de la agenda securatista del oficialismo. Hasta el momento hubo solamente una reunión de comisión por ese tema y fue de carácter informativo. Contó con la presencia del ministro de Justicia, Germán Garavano, y de los miembros de la comisión redactora, presidida por Mariano Borinsky.
Además, la Cámara Alta tiene pendiente la designación de Marisa Graham como nueva defensora de los Niños, Niñas y Adolescentes, un cargo que está vacante desde hace 13 años. El nombramiento de Graham fue aprobado por Diputados pero se trabó en el Senado por la resistencia de los legisladores que se oponen a la legalización del aborto, proyecto que Graham apoya.