Desde el Congreso de la Nación, el ministro de Hacienda Hernán Lacunza llamó ayer al próximo gobierno a “construir consensos económicos” a partir de los cuales el país logre pagar la deuda de la democracia, esto es, que “un tercio de los argentinos vive en la pobreza”, y reconoció que “los resultados de estos años han sido inferiores a lo esperado”. Al evaluar el gobierno de Mauricio Macri, Lacunza sostuvo que el “gradualismo” en el ajuste “debió ser financiado con emisión de deuda”. “Para trazar una reflexión sobre estos cuatro años, en primer lugar, si medimos por las variables convencionales empleo e inflación, los resultados han sido inferiores a los esperados”, admitió el funcionario.
El titular de la cartera de Hacienda concurrió a la Cámara de Diputados junto a integrantes de su gabinete a presentar formalmente el proyecto de Ley de Presupuesto 2020. En una exposición de casi una hora ante legisladores de la Cámara baja como del Senado, Lacunza detalló los puntos principales del plan, aunque algunos de los ítems ya habían sido dados a conocer por el propio ministerio días atrás. El proyecto prevé para 2020 un dólar a $67 en promedio que llegaría a $75 para fines de 2020, un crecimiento de la economía del 1% y un nivel de inflación del 34%, mientras que no contempla la refinanciación de la deuda ya que la deberá decidir el Parlamento.
“Tenemos que empezar a construir consensos en política económica. Escucho con esperanza que todos los candidatos presidenciales hablan de mantener el equilibrio fiscal. Que la inflación no es una forma genuina de financiar el déficit, que la deuda tiene un límite y que las estadísticas públicas tienen que decir la verdad”, enumeró. Sin embargo, el ministro aseguró que “hay otras cuestiones que no están claras”.
En ese sentido, planteó como “base” para el próximo período que las fuerzas políticas logren consensuar dos objetivos: “Una política pro-exportadora para darle viabilidad a cualquier proceso económico y una coalición pro empleo privado que es el que nos va a permitir corregir la pobreza”, explicó. En la charla, que tuvo muchos ingredientes de tenor político, el ministro añadió que en la crisis que comenzó en la Argentina en 2018 “hubo una combinación con distintas dosis de herencia, inconsistencias y algunos factores externos e internos como el corte abrupto de financiamiento a los mercados emergentes y la sequía”.
Sin embargo, el funcionario opinó que “a fin de este año habrá superávit gemelos, tanto en lo fiscal como en lo externo” y vaticinó que “la plataforma de despegue para el ciclo político que se inicia en un par de meses tiene mejores perspectivas que si estuviéramos en 2015, cuando había déficit gemelos”.