El gobernador Juan Schiaretti habría resuelto convocar a internas para la renovación de autoridades del PJ cordobés para el 26 de abril del presente año, en las que encabezaría la lista oficialista. El mandato de las actuales autoridades que preside el presidente provisional de la Legislatura, Oscar González, vence el próximo 30 de abril. En los últimos 20 años de estadía del peronismo en el poder provincial, la renovación de autoridades era casi un trámite administrativo. Nadie discutía el liderazgo de tuno, en su momento del fallecido ex gobernador José Manuel de la Sota o del propio Schiaretti, en sus dos mandatos anteriores.
Ahora, el sector de peronistas cordobeses que apoyaron a Alberto Fernández en la última campaña electoral busca consolidar una estructura propia, alentados por la decisión del Presidente de la Nación de darles lugares expectables a algunos en influyentes ministerios como el de Obras Públicas y Transporte. En este escenario y ante la realidad fáctica de que se deben renovar las autoridades del partido, Schiaretti jugaría fuerte, tratando de evitar que se erosione su liderazgo, al encabezar la boleta oficial en una eventual elección interna. No obstante, las principales espadas políticas del schiarettismo iniciarán conversaciones con los distintos sectores, para tratar de buscar la unidad.
En realidad, los contactos que se iniciarán en los próximos días apuntan a los dirigentes del espacio que lidera el senador Carlos Caserio, pero que también integran –entre otros– el secretario de Transporte, Walter Saieg, y el secretario de Obras Públicas, Martín Gill, también intendente de Villa María, en uso de licencia. Por su parte González, quien se hizo cargo de la presidencia del PJ, tras la renuncia de Caserio, en octubre pasado, se pronunció a favor de buscar la unidad. La elección interna es una herramienta democrática que permite elegir las autoridades cuando no hay consenso, pero en mi opinión personal, sería poco lógico involucrar al peronismo cordobés en un proceso interno, cuando el país –y Córdoba no es una isla, como lo dijo el gobernador– está en una difícil situación económica”, manifestó el dirigente de Villa Dolores.
Desde la vereda de los dirigentes que están encolumnados con el gobierno nacional, tampoco descartan dialogar, pero pusieron algunas condiciones, como consensuar a las futuras autoridades del PJ provincial. Caserio, quien presidió al peronismo cordobés hasta hace pocos meses, fue cauto. Aseguró que aún nadie le comunicó la decisión de convocar a una interna. El legislador nacional se pronunció a favor de la unidad, pero dejó claro que debe haber diálogo.