Los fiscales federales Cecilia Incardona y Santiago Eyherarbide pidieron ayer la indagatoria de Darío Nieto, el secretario privado del ex presidente Mauricio Macri; y de los ex jefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, en el marco de la causa por espionaje ilegal que tramitan en los tribunales de Lomas de Zamora, informaron fuentes judiciales.
Lo requirieron a través de un escrito que le presentaron al juez federal Juan Pablo Augé, a quien le solicitaron, además, que cite a una veintena de ex espías y a la ex empleada de la Dirección de Documentación Presidencial, Susana Martinengo, para que amplíen sus respectivas declaraciones indagatorias, dado que ya habían sido convocados por el juez removido de la causa, Federico Villena.
Se trata del expediente en el que se investigan supuestas maniobras de espionaje ilegal contra la ex presidenta y actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner; la ex gobernadora bonerense María Eugenia Vidal, el jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el obispo diocesano de Lomas de Zamora, Jorge Lugones; y el periodista del diario La Nación Hugo Alconada Mon, y Florencia Macri, hermana del ex presidente, entre otras víctimas.
«Consideramos que los nombrados conformaron una organización criminal construida desde el propio aparato del Estado Central, en especial desde el Poder Ejecutivo Nacional y una de sus dependencias directas, la Agencia Federal de Inteligencia», sostuvieron los fiscales en el dictamen.
«Con distintos roles, quienes componían la organización, se valieron de su calidad de funcionarios públicos y utilizaron la infraestructura del Estado Nacional para llevar a cabo actividades de inteligencia y/o espionaje en infracción a la ley 25.520, en distintos periodos y abarcando diversas jurisdicciones territoriales», señalaron en el texto de 129 páginas.
Una parte importante del material probatorio que obra en el expediente surgió de uno de los teléfonos celulares secuestrados a los espías investigados, donde se detectó que compartían parte de la información producida de forma ilegal en grupos de Whatsapp identificados como «Super Mario Bros», «Grupo Pilar», «Grupo Argentina», «Grupo Las Tres» y «Grupo Cueva», según se pudo reconstruir.