La Argentina oficializó ayer su salida del Grupo de Lima y explicó que la decisión se tomó por diferencias con el trato que ese bloque le dio a la situación de la crisis de Venezuela, que -según entiende el país- no ha conducido a nada”.
De esta forma, el gobierno de Alberto Fernández tuvo un gesto de acercamiento a la administración de Nicolás Maduro, y ratificó que su intención es trabajar para encaminar soluciones pacíficas y respetuosas de la soberanía y de los asuntos internos de cada Estado”.
Además, señaló que la participación de un sector de la oposición venezolana como un integrante más del bloque ha llevado a que se adoptaran posiciones que nuestro Gobierno no ha podido ni puede acompañar”.
El Grupo de Lima, formado en 2017 en la capital peruana durante la gestión de Mauricio Macri, exige la liberación de presos políticos y elecciones libres. En 2019, este grupo multilateral reconoció al opositor Juan Guaidó como presidente encargado del país caribeño.
Reiteramos que la mejor manera de ayudar a los venezolanos es facilitando que haya un diálogo inclusivo que no favorezca a ningún sector en particular, pero sí a lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional. Es claro que no pueden las autoridades venezolanas desconocer, sin embargo, que producir las condiciones para un diálogo que resulte productivo es primordialmente su responsabilidad”, expresó la Cancillería que encabeza Felipe Solá.
Esta decisión cosechó un amplio repudio de la coalición Juntos por el Cambio. Por caso, el ex canciller Jorge Faurie calificó como un grave error” de política exterior abandonar el grupo: Su objetivo fue y es ayudar que Venezuela recupere su democracia. Argentina no puede estar del lado de la dictadura de Maduro”, manifestó.
En tanto, el diputado Mario Negri señaló que en el día más significativo para la lucha por los derechos humanos en Argentina, el Gobierno tiene el mal tino de anunciar que se retira del Grupo Lima que condena internacionalmente la violación de los derechos humanos en Venezuela. Un despropósito mayúsculo”.