Con un masivo acto que se desarrolló el miércoles pasado en el Sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba, una amplia representación gremial, social, vecinal, política y de derechos humanos se comprometió a sostener una agenda de actividades y posicionamientos en contra de la privatización de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec).
En la mesa principal del evento, estuvieron Ilda Bustos, de Gráficos y la CGT Córdoba; Jorge Chalup, de ATE y la CTA Autónoma; Juan José «Toto» López, de la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos; Ana Mohaded, decana de la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC); Leticia Medina, de la CTA de los Trabajadores y la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNC (Adiuc); Ricardo López, de la CGT Regional; Mariana Mandakovic, secretaria general del Cispren y la CTA Autónoma; Javier Varetto, de la Organización de Trabajadores Radicales (OTR); y el anfitrión, Jorge Molina Herrera, de Luz y Fuerza de Córdoba.
La actividad contó con una larga y diversa lista de adhesiones de organizaciones sociales, políticas, gremiales, vecinales y de legisladores provinciales y nacionales.
El avance privatizador y la resistencia
«Fue un acto multitudinario, se colmó la sala Agustín Tosco y el hall de la entrada. Superó las expectativas que teníamos», expresó el secretario de Derechos Humanos de Luz y Fuerza, Alfredo Seydell, consultado por el diario La Nueva Mañana.
Precisó que en el acto, las diferentes alocuciones contribuyeron a la denuncia del intento de privatización de Epec que subyace detrás del avance del Gobierno de la Provincia para convertir a la empresa en una sociedad anónima. «La sociedad anónima deja la puerta abierta a la privatización. No es una pelea de los lucifuercistas, sino de todos los cordobeses», remarcó.
Y en virtud de lo ocurrido en estos días en la provincia y el país, con el calor extremo y los problemas en el suministro eléctrico, apuntó: «Las empresas privadas administraron el desastre energético que hubo, con gente que estuvo una semana y media o dos sin luz. Acá en Córdoba, sin embargo, con personal diezmado y con la falta de recursos que tenemos, en tres horas máximo se repuso el servicio. Eso tiene que ver con el rol social que cumple la empresa y con la dedicación y la calidad de trabajo de los compañeros».
Seydell aseguró que siempre «se ha considerado que el acceso a la energía es un derecho humano fundamental» y advirtió que «una empresa privada no va a llevar un cable a un dispensario que esté lejos de la ciudad ni la luz a una escuela rural o a un caserío».
En términos económicos, afirmó que «la empresa viene dando superávit hace tres años» y que la privatización no responde a otro motivo que no sea «crear negocios». Por ello, planteó, desde Luz y Fuerza afirman que «EPEC tiene que ser estatal e integrada»; ya que una privatización «va a perjudicar a los cordobeses».
Alertó Seydell que este es el quinto intento de privatización de la Epec y aseguró que los cordobeses van a rechazarlo en las calles. «El superávit de los últimos tres balances tiene que ver con el esfuerzo de los compañeros, que trabajan con poco personal y una importante pérdida del salario, y el desmantelamiento de la empresa», completó.
Respecto al planteo del gobierno provincial de que están obligados a convertir la empresa en sociedad anónima, para cumplir con una obligación derivada de la adhesión al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023; aseguró que eso es incorrecto, ya que «lo que hace el DNU es llamar a reconvertir las empresas en las que el Estado Nacional tenga participación e invita a provincias y municipios a hacer lo propio, pero no las obliga».
Frente al avance privatizador de la Provincia, Seydell reveló que desde Luz y Fuerza están trabajando en un frente legal y también con iniciativas con la comunidad y haciendo asambleas en los lugares de trabajo.
En torno de esa agenda, celebró la masiva participación en el evento de este miércoles: «Ver al movimiento obrero y a muchos actores de la sociedad juntos en defensa de Epec fue el lanzamiento de algo que va a ser fuerte en Córdoba».