El Gobierno atribuyó la suba de los dólares financieros a las trabas expuestas por la oposición en el Parlamento y a los amparos judiciales contra el DNU 70 que generan incertidumbre entre inversores y ahorristas.
«Si algunos rumores y los amparos al decreto hicieron que el mercado pase factura con un alza de 30% las consecuencias si no avanzan son impredecibles», afirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni.
El portavoz sostuvo que «no se puede saber lo que va a pasar si la ley se aprueba, lo que sí va a pasar es que si no se aprueba, no se va a poder salir de la pobreza, de la encerrona inflacionaria y del aislamiento que se tiene con el mundo».
El vocero presidencial puso especial énfasis en subrayar que «la aprobación de la ley depende del Poder Legislativo, no del Ejecutivo».
«Nosotros estamos haciendo nuestra parte, que fue para lo que nos votó la gente: ahora necesitamos que el Poder Legislativo haga la suya», añadió.
Adorni remarcó que «al principio de la gestión con las medidas de urgencia se logró estabilizar determinadas variables de la economía, y luego se siguió con el DNU y la Ley de Bases enviada al Congreso».
En esa línea sostuvo que «los rumores sobre los desacuerdos en el tratamiento de la Ley y los amparos al DNU generaron que los dólares financieros salten de los $900 a los $1200».
«Sabemos y estamos convencidos hacia dónde vamos si la ley se aprueba y también estamos convencidos hacia dónde vamos si no se aprueba», insistió el vocero.
Adorni afirmó que «las medidas son necesarias para evitar el desastre». «Lo que vimos con la suba del dólar es sola una muestra gratis de lo que puede suceder si la política no acompaña», concluyó.