Los equipos técnicos del área de salud de Juntos por el Cambio, Hacemos por Nuestro País, y Unión por la Patria dieron a conocer ayer sus propuestas y respondieron inquietudes durante un encuentro organizado por el Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba (CMPC).
Participaron del evento realizado vía Zoom Andrés Scarsi, en representación de la candidata a presidenta de JxC, Patricia Bullrich); Francisco Fortuna y Gabriela Barbás por el lado del postulante de HxNP, Juan Schiaretti; y Arnaldo Medina, por el aspirante oficialista, Sergio Massa.
En la ocasión, el titular del CMPC, Héctor Oviedo, fue el encargado de dar la bienvenida a los asistentes y destacó que su participación fue “una buena noticia” en el contexto que atraviesa nuestro país. El directivo hizo referencia también a la difícil situación que afronta el sistema de salud, en el marco de la crisis económica. “Para nosotros, la salud no es sólo un tema importante, es una forma de vida. Sin salud no hay desarrollo, no hay estudio, no hay posibilidad de construcción, no hay libertad”, enfatizó Oviedo.
Antes de la presentación de Scarsi, se proyectó un video de Bullrich, quien dijo que la salud está en crisis por los propios problemas del sistema y por la “debacle económica”. “Por eso -continuó- no sólo hacen falta políticas sectoriales, sino un plan que nos haga salir de esta situación y que nos haga crecer”. “Sé de los problemas que tienen, de los enormes desafíos de un sistema de salud que dé respuestas a todos. Tenemos con qué hacerlo, tenemos que gastar bien, tenemos que lograr que todos los argentinos logren acceder a todos los efectores”, completó la postulante de JxC.
Scarsi también manifestó la importancia del encuentro. “Para nosotros, es muy importante poder vincularnos, más allá de la distancia”, señaló e hizo referencia a que la búsqueda de consensos es clave.
El expositor, médico psiquiatra y secretario de Salud de Vicente López (Buenos Aires), enumeró: “Tenemos crisis de recurso humano, incluido el de la distribución; crisis en el sistema financiador y crisis en el sistema prestador. Hay temas, como el de la salud mental, que nos ponen ante un desafío”. “Tengo 41 años y hace 15 que los problemas son los mismos”, lamentó.
Scarsi hizo hincapié en la gobernanza de la autoridad sanitaria. “No puede haber política sanitaria si no hay capacidad de gobernanza. Nuestro equipo entiende que eso surge de un buen diagnóstico y de la búsqueda de consensos”, aseguró. Insistió en que “hay un problema de rectoría del Ministerio de Salud” y aseveró que “es un problema estructural”.
Respecto de los recursos humanos en salud, destacó el componente de los ingresos. “Hay que poner sobre la mesa la cuestión salarial de manera coordinada con las instituciones gremiales para poder ponernos de acuerdo en este punto. Hoy estamos discutiendo el pago indebido, copagos u otros mecanismos de compensación con los que nosotros no estamos de acuerdo. Nosotros planteamos hacer actualizaciones y poner lo salarial en primera instancia”, sostuvo.
A su turno, en torno al déficit de recursos humanos en especialidades críticas, como cirugía, ginecología, clínica médica y pediatría, indicó que debe diseñarse una política de incentivos, con financiamiento específico, para atraer el interés de los egresados y para que se distribuyan de manera equitativa en el territorio nacional.
“También hay que ponernos de acuerdo sobre qué rumbo debe tomar la salud mental, específicamente la infanto-juvenil, porque no podemos garantizar el acceso de infantes y adolescentes a una atención en salud mental”, continuó.
Dijo que el Ministerio de Salud de la Nación no debe actuar en forma aislada en la toma de decisiones para la resolución de problemas y que debe integrar a otros subsectores, como el privado y también a las instituciones civiles. Finalmente, y ante una pregunta de los integrantes del CMPC, señaló Scarzi el problema de la fragmentación del sistema de salud y destacó, como una de las expresiones de esa fragmentación, que cada uno de los municipios y comunas de una provincia -hizo énfasis en que en Córdoba son 427 y en la provincia de Buenos Aires 135- aplica su propia política sanitaria.
La visión de Fortuna y Barbás
Luego, llegó el turno del presidente provisorio de la Legislatura de Córdoba y la ministra de Salud de la Provincia, Gabriela Barbás, como referentes de salud de Schiaretti. En la oportunidad, Fortuna destacó que Hacemos por Nuestro País entiende a la salud como un derecho y que el Estado, en todos sus niveles, debe garantizarlo, con un modelo centrado en las personas y de manera colectiva, equitativa, accesible y de calidad.
Remarcó que el contexto macroeconómico genera pobreza y que eso repercute en la salud pública. “Por eso nosotros pensamos que el abordaje debe ser integral”, indicó. E hizo referencia a los factores que debe comprender: “Infraestructura, talento humano y articulación público-privada”.
“Sería muy importante establecer una mesa de diálogo en el orden nacional donde pueda participar el Estado, el sector privado en todas sus expresiones, la seguridad social, las grandes obras sociales, como el Pami, la Superintendencia de Servicios de Salud y todos los representantes de las profesiones del ámbito de la salud, teniendo como eje al Consejo Federal de Salud, donde están representadas todas las provincias argentinas con el Ministerio de Salud de la Nación como órgano rector”, amplió Fortuna.
Por su parte, Barbás dijo que “no da lo mismo contar con un Ministerio de Salud que con una Secretaría de Salud. Creemos que debemos contar con un Ministerio de Salud como órgano rector”.
Señaló que se debe profundizar en un modelo basado en la Atención Primaria de la Salud (APS). En relación con los recursos humanos, señaló que, además de incentivos para atraer a jóvenes graduados a las especialidades críticas, es preciso reformular los planes de estudios de las carreras de ciencias de la salud y también avanzar en la creación de tecnicaturas para que el equipo de salud sea inter y multidisciplinario.
Finalmente, Fortuna manifestó que el sistema debe tender hacia la integración y también presentó a la fragmentación como uno de los problemas actuales. “Hay que evitar la superposición de funciones. La digitalización es una de las cuestiones clave para que cada nivel del Estado tenga una competencia y pueda organizar los distintos niveles de responsabilidad”, argumentó.
Medina, la postura del massismo
Posteriormente, Medina lamentó que la salud no hubiera estado presente en el último debate presidencial e hizo alusión a críticas de Javier Milei a aspectos vinculados con la salud pública, como el funcionamiento del Incucai o la respuesta del sistema ante la pandemia, que fueron “ofensivas” e “incendiarias”.
“Tenemos que rescatar que tenemos un sistema de salud con tradición en nuestro país. Y es un sistema de salud que tiene logros importantes desde los puntos de vista de la cobertura y el acceso, desde las prestaciones más simples, hasta las más complejas, como los tratamientos de enfermedades graves”, elogió.
De todas formas, reconoció que “hay problemas en el sistema de salud que hay que resolver”. Citó, entre ellos, al de la gobernanza. Manifestó que es importante que haya un Ministerio de salud y aseveró que cuando no lo hubo (durante la gestión de Mauricio Macri, cuando se convirtió en secretaría), “perdió jerarquía institucional y presupuesto”. Precisó que actualmente el presupuesto en salud es de 700.100 millones de pesos, un 30% más de lo que hubiera sido si se hubiera mantenido la decisión de no tener ministerio. “Hoy sería inferior a los 480 mil millones de pesos. Eso significa menos acceso de la población y debilitamiento de programas y planes de salud”.
Aseguró que a nivel mundial no se discute la importancia de la salud pública y que esa fue una de las enseñanzas que dejó la pandemia. Admitió que actualmente hay problemas de accesibilidad y calidad en la atención y que “la madre de los problemas es la fragmentación”.
“La integración es que todas las argentinas y todos los argentinos puedan tener el mismo acceso al sistema de salud y con los mismos estándares. Tiene que haber un plan nacional de acceso y calidad de salud que pueda ayudar a garantizar esto”, señaló.
Finalmente, dijo que prefería hablar en términos de “talento humano” y no de “recurso o capital humano” y que hoy ese talento humano estaba afectado por la remuneración y por el déficit en las especialidades críticas.
Apuntó que debe haber incentivos para atraer a los egresados a las especialidades críticas y consideró que no hay déficits de médicos (indicó que rondaban los 40 por mil habitantes) y que era mayor el déficit en personal de enfermería (48 por mil habitantes, cuando, aseveró, en otras partes del mundo es el doble).