Las intensas lluvias del fin de semana se caracterizaron por las inundaciones y los daños económicos causados en varias localidades cordobesas. También, pusieron en discusión los incendios del año pasado y la escasa capacidad del suelo serrano para absorber el agua.
No obstante, estas precipitaciones tienen otra cara, mejor y que genera buenas noticias: gracias a la gran cantidad de agua ingresada desde los ríos, los distintos diques del territorio provincial crecieron considerablemente. Esta situación provoca cierto alivio en los valles, que vienen sufriendo una sequía muy grave que obligó a los municipios a limitar el suministro de agua potable.
En el lago San Roque, en Villa Carlos Paz, las precipitaciones de las últimas semanas permitieron que su nivel del agua se sitúe en los 32.26 metros, quedando a 3.04 del nivel máximo, que es de 35.30 metros. En diciembre, este dique estaba 5.80 metros por debajo de su capacidad máxima. Esta situación cambió el panorama en la turística villa, ya que su lago volvió la actividad de catamaranes e hidropedales para los visitantes que veranean en el lugar, y que no se podían utilizar por el poco nivel de agua que había.
La situación en los restantes diques de la provincia es similar, ya que todos ellos se encuentran por debajo de su capacidad máxima. El que más bajo tiene su nivel de agua es el dique La Viña, con 87.91 metros, lo que lo posiciona con 12.58 metros por debajo de su nivel máximo. Luego lo sigue el dique Pichanas, el cual se ubica 9 metros menos que su capacidad máxima. Seguido de este se ubica La Quebrada, que actualmente tiene su nivel de agua en 27.28 metros, 6.72 metros menos que lo máximo. El famoso dique Los Molinos, por su parte, también se recuperó y alcanzó los 49.27 metros, lo que lo ubica a 3.73 metros del máximo. En una situación se similar se encuentra Embalse Río Tercero, el cual está aún 2.13 metros más bajo. Por su parte, los diques El Cajón y Cruz del Eje se encuentran menos vacíos, ya que están a 1.96 metros y 1.82 metros por debajo de su capacidad máxima, respectivamente.
A pesar de que todos los diques vieron mejorar su situación, los especialistas advierten que la situación sigue siendo crítica. Además, expresaron que si las lluvias vuelven a faltar, podrá repetirse el mismo escenario que hace unos meses, lo que obligó a limitar el agua potable. Por esta razón, solicitan a los pobladores y turísticas cuidar el líquido vital.