El juicio por el crimen de Lucio Dupuy ya entró en la recta final. A días de que se conozca la sentencia, su abuela paterna recordó al niño asesinado por su madre y su pareja y contó cuándo fue la última vez que lo vio.
“¿Cómo Lucio no me dio una pista, una señal? Me da una impotencia y un sufrimiento, porque yo estuve ahí adentro con él pero estaba feliz, jugaba con nosotros y no nos dio ninguna señal, para nada”, se lamentó Silvia Gómez por no haber podido salvar a Lucio.
Ese fue el último encuentro. Según Gómez, duró entre 15 y 20 minutos y fue “en la casa de sus asesinas”, por la madre Magdalena Espósito Valenti, y su pareja, Abigail Páez. “En julio viajé de General Pico a Santa Rosa por un turno médico y mi hija me llevó hasta la casa donde vivía Lucio”, recordó. Y continuó: “Después de mandarle muchos mensajes para que me dejara verlo, la progenitora nos dijo que fuéramos a la casa”.
En ese mismo lugar, cuatro meses más tarde, Lucio Dupuy fue asesinado. “Cuando fuimos, la progenitora no estaba, estaba la otra asesina. No pudimos llevarlo a ningún lado, porque nos dijo que estaba congestionado y no podía salir. Fueron quince o veinte minutos en la casa, mientras Páez daba vueltas y preparaba el almuerzo”, expresó Gómez en diálogo con Télam.
Silvia Gómez se lamentó por no haber visto algún indicio sobre lo que el niño estaba viviendo. “En ese rato, Lucio estuvo feliz, nos mostraba los regalos que le habían hecho para el cumpleaños. Jugamos con sus juguetes, parecía un niño feliz” comentó. Y se preguntó: “¿Cómo no nos dijo nada?, ¿cómo no nos dio una pista?”.
“Él nos mostraba los juguetes, estaba contento y yo le daba las gracias a esta asesina por dejarnos verlo. El nene no tenía ninguna congestión, no estaba engripado, hoy está claro que no querían que el nene estuviera a solas con nosotros afuera”, manifestó.
Y de nuevo se lamentó: “Si hubiésemos visto algo, si hubiésemos preguntado, si nos hubiésemos enterado, Lucio podría estar vivo”.
Para Gómez, la muerte de su nieto se dio por una “cadena de responsabilidades” y apuntó contra la jueza Pérez Ballester. “Le dio la tenencia a la madre de Lucio sin rever el expediente, sin valorar que se fue dos años de mochilera y abandonó a su hijo”, se indignó.
“No hubo un seguimiento. No averiguaron cómo iba a estar Lucio. Dónde iba a vivir. No hizo nada. En educación no vieron ningún dibujo donde el nene pedía auxilio a gritos. La directora nos dijo que Lucio era un chico que corría, que se sumaba al juego, pero en la audiencia, cuando vimos los dibujos, Lucio pedía auxilio”, continuó.
También cuestionó el accionar de los médicos y la Policía, que no vieron las alertas: “El nene entró cinco veces en casi tres meses. Con un botón podés saber la historia de la criatura y podés llamar la atención. En Seguridad los que iban por los llamados, solo golpearon las manos y después dijeron que no pasaba nada”.
Por último, dijo que le “hubiera encantado” que la vecina que expresó tener miedo por Lucio se hubiera comunicado con ella o su familia. “A Lucio todos le dieron la espalda”, sentenció.
El próximo jueves 2 de febrero, los jueces Aníbal Olié, Alejandra Ongaro y Daniel Sáez Zamora darán el veredicto en el juicio por el crimen del nene de cinco años. Espósito Valenti y Páez fueron investigadas por asesinarlo a golpes y por abusos contra Lucio. La fiscalía pidió prisión perpetua.