Este lunes 13, los jueces encargados de la Sala B de la Cámara Federal de Córdoba dispusieron sobreseer a Gustavo Arce, dueño de Agustino Cueros. El flamante empresario había sido acusado por tres hechos de evasión agravada que habían sido imputados en el marco de la causa penal iniciada por una denuncia de Afip en el año 2019, y que llevó a su posterior detención. En esta línea, los ejercicios fiscales se habrían dado entre 2014 y 2015.
A su vez, cabe añadir que la denuncia por estos hechos tuvo lugar a partir de un supuesto incumplimiento de parte de Arce al régimen de blanqueo y exteriorización de capitales dispuestos por Ley 27.260, lo que implicó que el Fisco dispusiera unilateralmente el decaimiento de los beneficios dispuestos por ese régimen y formulara la denuncia penal.
En aquel momento, el dueño de “Agustino” aseguró que no había cometido ningún delito. En ese marco, su abogado, Agustín Díaz Cafferata, insistió en que todas las declaraciones patrimoniales se realizaron dentro de la ley de blanqueo, pero que la Afip decretó que un movimiento no era válido e hizo caer todo el acuerdo.
No obstante, tras el pago de 1.5 millones de pesos, Arce fue puesto en libertad luego de residir durante tres semanas en el penal de Bouwer.
Finalmente, este martes los jueces de cámara Liliana Navarro y Abel Sánchez Torres consideraron que el dueño de Agustino no ocultó las operaciones por las que estaba imputado, sino que fueron incorrectamente declaradas. Para los magistrados consideraron que el caso «corresponde a la extinción de la acción penal ordenando el sobreseimiento del empresario».