Tras 15 largos años de investigación, el crimen de Nora Dalmasso terminó impune. En los tribunales de Río Cuarto, un jurado popular absolvió por unanimidad ayer a Marcelo Macarrón, en consonancia con el pedido que había hecho el fiscal Julio Rivero durante la lectura de alegatos.
Luego de deliberar por casi una hora, y pasados tres meses desde el inicio de las audiencias, más de 200 testigos y un expediente de 7.000 fojas repartidas en 34 cuerpos (más ocho anexos de pruebas), el jurado popular declaró la absolución del viudo, tal como lo había solicitado el fiscal y el abogado defensor Marcelo Brito.
“No puedo acusar por acusar”, dijo Rivero, tras lo cual agregó: “No puedo sostener que la mató un sicario, no porque no hay prueba, sino porque hay prueba de que fue (sexo) consentido. El sexo consentido echa por tierra un acuerdo criminal”. Macarrón estaba acusado de “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal”.
Ni bien se leyó el veredicto, el viudo se fundió en un abrazo con su abogado defensor. Tras saludar a varios de los presentes, buscó a su hijo Facundo, quien fue uno de los imputados que tuvo la causa, y cuando lo encontró, se quebró en llanto. Al salir de tribunales, el odontólogo dijo que espera “empezar una vida nueva” y destacó la unidad familiar para afrontar el juicio.
Cabe mencionar que el próximo 5 de agosto a las 11 se conocerán los fundamentos del fallo, que se leyó ayer pasadas las 16.30. En él, se declaró que Nora Dalmasso fue víctima de violencia de género, se cesaron las restricciones impuestas a Macarrón y se dejó sin efecto el gravamen impuesto sobre el inmueble de Villa Golf. Tras conocerse el dictamen, Juan Dalmasso, hermano de la víctima, aseguró que el juicio que tuvo como acusado al viudo fue una “cortina de humo que solo buscó que la causa prescribiera”.