El conductor de 20 años que el martes manejaba a altísima velocidad cuando atropelló a una familia de turistas cordobeses que paseaban por el centro de Rosario será imputado por el delito de doble homicidio simple con dolo eventual agravado.
El auto se subió a la vereda y mató a una mujer y una de sus hijas, de 16 años. El padre resultó ileso y la otra hija, de seis, fue trasladada a Córdoba por su traumatismo encéfalo craneano. El hombre le salvó la vida al tironearla del brazo cuando vio que se acercaba violentamente el coche, lo que la alejó unos centímetros y evitó que el impacto sea mortal.
Todo ocurrió en la Costanera Central, a la salida del túnel Presidente Illia. Gracias a las cámaras de seguridad, se probó que Agustín López Gagliasso, que permanece detenido pero este jueves recibió el alta luego de recuperarse de las lesiones que también sufrió por el brutal impacto, iba a más de 120 kilómetros por hora.
La fiscal Mariana Prunotto caratuló el caso como «homicidio simple con dolo eventual, agravado por la pluralidad de víctimas y una velocidad de ruta en eje urbano», una figura que contempla penas de hasta 25 años de cárcel.
“No tiene explicación lo que pasó. Estamos tratando de superarlo de la mejor manera. Estamos trasladando a Vicky, que está bien. Mi vida cambió en un segundo”, afirmó Diego García, el padre. Las víctimas fueron identificadas como Tania Daniela Gandolfi (40) y su hija, Agustina Magalí García (16). «No tiene explicación cómo corrieron una picada en ese lugar. Fueron milésimas de segundos que no dieron tiempo a reaccionar. Es un milagro que Vicky y yo estemos vivos», agregó García.
Se está investigando si el Peugeot corría una picada con una moto, cuyo conductor aún no fue identificado. Una de las hipótesis es que la moto se acercó mucho al auto, lo que hizo que el conductor del vehículo de cuatro ruedas pegara un volantazo y se subiera a la vereda del lado del estacionamiento.
García dijo que “hay que cambiar las penas por las muertes en el tránsito, porque las actuales son muy leves comparadas con el daño que causan estas personas. Mi objetivo a partir de ahora es trabajar para que tragedias como la que vivimos no vuelva a repetirse. Y si se repite, que los responsables sepan que sufrirán consecuencias y que piensen dos veces antes de correr picadas”.