Una pediatra del hospital Eva Perón, ubicado en barrio Las Violetas, denunció a través de sus redes sociales que una persona entró armado a la guardia del nosocomio y amenazó a los médicos presentes.
El hecho ocurrió alrededor de las 2:30 del domingo, cuando, tras el ingreso de un herido por arma de fuego al nosocomio de avenida Santa Ana al 4800, los acompañantes amenazaron al personal de salud con un revolver para que le salvaran la vida. “Lo de hoy fue límite, nunca viví una situación así”, contó desconsolada la médica pediatra.
Érica, una de las médicas, relató que el paciente ingresó en una silla de ruedas empujada por otros dos hombres a los que les pidieron que se retiren para poder atender al paciente.
“Los acompañantes salieron del shockroom pero a los minutos irrumpió otro hombre en la sala”, comentó Erica.
Y continuó: “Entró como si nada cuando estábamos revisando al herido para ver dónde tenía el balazo”.
“Le preguntaba al paciente que estaba acostado quién lo había herido, ahí la médica clínica le pidió que se retirara y este tipo sacó un arma para apuntarnos”, detalló la denunciante.
En su posteo de Instagram, la pediatra explicó que la guardia la integran dos médicos clínicos, dos pediatras, un cirujano y un traumatólogo; y que la demanda espontánea es mucha ya que no sólo atienden “urgencias y emergencias” sino también a pacientes “que hace un mes les duele la espalda, o tienen un dolorcito de garganta”.
En la publicación, la médica señala: “Es la misma gente que se pone violenta y nos agrede porque hay, a veces, hasta dos horas de demora”.
“Hoy, la situación de violencia fue diferente, sobrepasó todo nivel de integridad psicológica y física. A la madrugada ingresó un paciente sexo masculino por una herida de arma de fuego, y lamentablemente, uno de sus acompañantes estaba armado, y apuntando a los médicos de guardia, exigía que le salvarán la vida. En ese momento, se le cayó una bala… Gracias a Dios, para los que creemos en él, o gracias a otras energías, para otros, ninguno de los médicos salió herido. Pero HOY, ¿y mañana? Mañana no lo sabemos», argumentó la médica.
Además, aclaró que, si bien el hospital cuenta con guardias de seguridad, los mismos “no tienen armas y también exponen su vida”. Por lo que finalmente, exigió que sean escuchados y protegidos ya que, “hoy contamos la historia de que estamos todos bien físicamente, aunque psicológicamente muy golpeados. Pero mañana, mañana no sabemos”, concluyó.