Exequiel Di Tofino, investigador de las cuencas hídricas de la provincia, calificó ayer al acueducto que traerá agua desde el río Paraná a nuestra provincia como una obra “absolutamente inviable” y “monstruosa, por la envergadura que tiene y por los efectos que puede llegar a causar”.
Al respecto, denunció que la construcción del acueducto Córdoba – Santa Fe, cuya financiación de la primera etapa fue firmada el domingo pasado en Kuwait por los gobernadores Juan Schiaretti y Omar Perotti, generará “problemas ecológicos irreversibles”.
“Los gobiernos tienen una política de la inmediatez que no supera las 24, 48 horas; pareciera que gestionaran de un día para el otro”, afirmó el especialista. Y agregó: “No toman la evidencia fáctica y los datos experimentales que hay desde las universidades y los institutos de investigación y demás; hacen caso omiso a todas las recomendaciones que los profesionales hacemos de los recursos ambientales”.
Además, Di Tofino señaló que esos fondos podrían ser invertidos en infraestructura en la provincia, como extender el sistema de cloacas y agregó: “No se hacen las inversiones sobre lo que ya tenemos aquí, que sería muchísimo más económico y viable”.
Por otra parte, el especialista afirmó: “El rechazo de las unidades académicas es total. El stress hídrico del Paraná es irreversible. Y esto significa quitarle más agua”. “Parecería que es algo sin ningún tipo de planificación desde la ingeniería, geología, técnico, para resumirlo”, opinó en declaraciones a Radio Nacional Córdoba. Finalmente, destacó que lo más preocupante es “el requerimiento energético para bombear el agua. La alteración del ecosistema será brutal”, agregó.