“La idea es que nadie se quede afuera”, sintetizó en una nota reciente el flamante director artístico del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que mañana arranca su 37 edición con la promesa de volver a sus mejores tiempos, ya sin el fantasma de la pandemia de coronavirus como amenaza y límite fáctico a las posibilidades del encuentro. Pablo Conde debutará al frente del equipo programador que supo dirigir la cordobesa Cecilia Barrionuevo –quien sigue vinculada al festival, organizando el 5° Foro de Cine y Perspectiva de Género– en una edición que seguramente tendrá su sello forjado en las célebres noches de cine de terror de la sección Hora Cero, profundizando el tradicional eclecticismo del encuentro marplatense, cuya estampa cinéfila nunca estuvo reñida con el cine de género, más bien al contrario. “Cualquiera sea el espectador, siempre va a encontrar algo que lo atraiga”, prometió Conte. El siguiente repaso acaso confirma sus palabras.
Por las calles de la ciudad feliz –nunca más justo el apodo que en esta época– caminarán por ejemplo figuras como el director norteamericano John McTiernan, responsable de filmes de acción como “Duro de matar” (1988) o “Depredador” (1987) –que se verán aquí–, la cineasta francesa Patricia Mazuy –toda una promesa a descubrir, quien tendrá una retrospectiva propia-, el célebre director de fotografía portugués Rui Poças, la productora y realizadora argentina Lita Stantic y el jefe de redacción de la mítica revista “Cahiers du cinema”, Marcos Uzal, entre otros. La heterogeneidad es evidente: todas las formas cinematográficas se encontrarán en Mar del Plata 2022, que nuevamente se realizará en forma enteramente presencial, como antes de la pandemia. La sanción del proyecto de ley que extiende por 50 años las asignaciones especiales a la cultura, promovido por el diputado cordobés Pablo Carro, le pone la frutilla del postre a la fiesta cinéfila que se volverá a saborear plenamente en la ciudad costera, tras una edición virtual en 2020 y otra híbrida en 2021.
Las competencias
Como siempre, lo principal es la programación, que este año se ampliará a 241 títulos entre cortos, medios y largometrajes, con entradas accesibles a un precio de 260 pesos. También se repetirán las competencias, divididas entre la Internacional ––donde habrá cuatro películas argentinas–, Latinoamericana –con tres cintas nacionales–, Argentina y Estados Alterados –que tendrá tres argentinas–, en cuanto a largometrajes. Las justas se replicarán en versión cortometraje sin la última sección, que se cambia por la Competencia En Tránsito o Work in Progress, donde participarán los cordobeses Pablo Martín Weber (“Ecos de XingJiang”) y Alejandra Lipoma y Romina Vlachoff (“El verano más largo del mundo”) con sus respectivos proyectos en curso.
Si bien la mayoría de las películas en competencia son estrenos absolutos –y la apuesta siempre es descubrir a nuevos artistas- hay algunos nombres conocidos: en la Internacional se encontrarán autores consagrados como la portuguesa Rita Azevedo Gomes (“O trio em mi bemol”) o el estadounidense Andrew Bujalski (“There There”) con jóvenes talentos como el crítico porteño Lautaro García Candela, miembro de la revista “La vida útil”, que presentará “Cambio cambio”, su segundo largo. A ellos se sumarán otra película estadounidense (“How to Blow Up a Pipeline”, de Daniel Goldhaber), una paraguaya (“Lobo y perro”, de Cláudia Varejão), una boliviana (“Los de abajo”, de Alejandro Quiroga), una suiza (“Retreat”, de Leon Schwitter), una brasileña (“Saudade fez morada aqui dentro”, de Haroldo Borges), una canadiense (“So Much Tenderness”, de Lina Rodriguez) y tres argentinas más (“El rostro de la medusa”, de Melisa Liebenthal, “La uruguaya”, de Ana García Blaya, y “Tres hermanos”, de Francisco J. Paparella).
En la Competencia Latinoamericana, a la vez, se verán los nuevos filmes de los argentinos Santiago Loza («Amigas en un camino de campo») y Laura Citarella («Trenque Lauquen»), grandes nombres de la cinematografía nacional, más el debut en largo de la reconocida fotógrafa Adriana Lestido (“Errante: La conquista del hogar”); además de los estrenos del brasileño Adirley Queirós, esta vez junto a Joana Pimenta (“Mato seco en chamas”) o el chileno Ignacio Agüero (“Notas para una película”), entre las obras más prometedoras de la sección. A la vez, en la Competencia Argentina se verá el nuevo trabajo de la directora cordobesa María Aparicio (“Sobre las nubes”), más las películas de Martín Farina en compañía de Willy Villalobos (“Náufrago”), Mara Pescio (“Barrio modelo”), Nicanor Loreti (“Búfalo”), Leandro Listorti (“Herbaria”), y Maximiliano Schonfeld (“Luminum”), entre otros nombres conocidos a nivel nacional. Ya en la versión de cortos de la sección, competirán los nuevos trabajos de los cordobeses Julia Pesce (“Las habitaciones vacías”) y Mariano Luque (“Los misterios del mundo”).
Otras secciones
La lista ya muestra la envergadura del encuentro y justifica su existencia, aunque es apenas el inicio: en las llamadas “secciones paralelas” del festival se estrenarán por ejemplo las nuevas producciones de Lucrecia Martel (“Camarera de piso”); los franceses Bertrand Bonello (“Coma”), Mia Hansen-Løve («Un beau matin») y Serge Bozon (“Don Juan”); los españoles Albert Serra (“Pacifiction”), Jonás Trueba (“Tenéis que venir a verla”), Isaki Lacuesta (“Un año, una noche”) y Carla Simón (“Alcarrás”); el coreano Hong Sang Soo (“Walk Up”); el norteamericano Sam Mendes (“Imperio de luz”); el mexicano Guillermo del Toro (“Pinocho”); el iraní Jafar Panahi (“No Bears”); el irakí Abbas Fahdel (“Tales of the Purple House”); o el argentino Raúl Perrone (“SINFON14”), entre lo más esperado por la comunidad cinéfila regional. Como de costumbre, Mar del Plata cierra el año festivalero reuniendo lo mejor que se vio en el mundo durante 2022, un privilegio que sólo puede ofrecer el encuentro argentino.
A su vez, el festival ofrecerá algunas secciones imperdibles, como las proyecciones de cine mudo musicalizadas en vivo (con los clásicos silentes «Nosferatu», de Friedrich Wilhelm Murnau, y «Häxan», de Benjamin Christensen, entre otros); un ciclo de Comedias británicas “inoxidables”, el legendario “Hora Cero” con sus películas de género, además de los homenajes a Leonardo Favio a diez años de su muerte (con las proyecciones de «Juan Moreira», «El dependiente» y «Nazareno Cruz y el Lobo») y Jean Luc Godard (cuyo clásico «Sin aliento» abrirá el festival), con el filme “Godard seul le cinéma», de Cyril Leuthy, que se propone abordar su obra de resonancias infinitas.
Más importante aún, entre los focos habrá una retrospectiva de la mítica actriz y cineasta japonesa Kinuyo Tanaka (de quien se podrán ver «La luna se eleva» y «Pechos eternos», más filmes dirigidos por Kenji Mizoguchi, Heinosuke Gosho, Keisuke Kinoshita y Mikio Naruse); además de un foco al alemán Heinz Emigholz y el lituano Jonas Mekas, de quien se verán películas poco conocidas. A lo que se suman las charlas con Maestras y Maestros (estarán los citados McTiernan, Mazuy, Uzal, Rui Poças, entre otros), la presentación de al menos dos libros publicados por el festival y homenajeas a actores argentinos como Cecilia Roth y Ricardo Darín, con proyecciones al aire libre.