La Administración Nacional de Aduanas detectó maniobras fraudulentas por parte de empresas importadoras, destinadas a disminuir la base imponible en sus declaraciones juradas y, de este modo, pagar menos regalías por el uso de marcas registradas.
Como consecuencia de un trabajo de inteligencia, el organismo descubrió prácticas que tendieron a ahuecar la base imponible de 35.000 importaciones en más de US$ 140 millones, por lo cual ha intimado a las empresas involucradas a reparar sus acciones.
Según lo informado, agentes especializados detectaron errores u omisiones en las declaraciones de más de 40 firmas importadoras multinacionales, que no daban cuenta de giros de fondos que estaban obligadas a realizar para poder hacer uso de marcas registradas.
Cabe destacar que la legislación vigente establece que los cánones y derechos de licencia no incluidos en el valor de la factura de las mercaderías forman parte de la base imponible de las importaciones. El artículo 8 de la Ley N° 23.311 —el Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comercio— establece claramente: «Para determinar el valor en aduana (…) se añadirán al precio realmente pagado o por pagar por mercancías importadas (…) los cánones y derechos de licencia relacionados con las mercancías (…) que el comprador tenga que pagar directa o indirectamente como condición de venta de dichas mercancías».
Por ello, la documentación que debe ser presentada obligatoriamente ante cada importación exige que los importadores informen si existen cánones o derechos de licencia que no estén incluidos en el valor de la factura de las mercaderías.
Entre los principales rubros de las empresas que mostraron irregularidades, se destacan las compañías de telefonía celular por más de US$ 112 millones, automotrices por US$ 7 millones y los rubros de embalaje e indumentaria por más de US$ 4 millones cada uno.
Frente al hallazgo de estas irregularidades, la Aduana informó que ha diseñado un Plan Sistémico de Fiscalización sobre la importación de mercaderías sujetas al pago de regalías, a fin de detectar nuevas inconsistencias que puedan impactar en la recaudación por derechos de importación.