El oficialismo de Brasil obtuvo ayer una importante victoria en el Congreso, donde la oposición de derecha es muy fuerte, al obtener la presidencia de ambas cámaras para sus aliados, determinantes para la gobernabilidad del presidente Luiz Inácio Lula de Silva.
En ese marco, el socialdemocrático Rodrigo Pacheco (PSD) fue reelecto como presidente del Senado al imponerse en primera vuelta de votación secreta al bolsonarista y liberal Rogério Marinho (PL), por 49 votos a 32. Pacheco contó con el respaldo de Lula da Silva (PT) y de seis partidos: PSD (15), MDB (10), PSB (4), PDT (3) y Rede (1). En el primer mandato, Pacheco también fue apoyado por Planalto, cuando el presidente era Jair Bolsonaro (PL).
A diferencia de la elección de Pacheco, la reelección como presidente de la Cámara de Diputados, el centrista Arthur Lira, se daba por descontada, porque se sabía que contaba con el respaldo de 496 legisladores de diversa extracción, sobre 513 miembros del cuerpo. Finalmente, a la hora de la votación, fueron 464 los votos que lo consagraron. Lira, que representa a una coalición informal de partidos conservadores conocida como “Centrao” (el gran centro), es el tercer cargo institucional del país, detrás de Lula da Silva y del vicepresidente, Geraldo Alckmin.
De todas formas, con la elección previa a esta elección de autoridades, los números que consecharon Pacheco y Lira no son representativos de cómo se reparte el poder en ambas cámaras. El PL de Bolsonaro tendrá 99 de los 513 escaños de la Cámara de Diputados, la mayor bancada que haya tenido cualquier partido desde 1998. En el Senado, que renovó un tercio de sus 81 asientos en los comicios, será la segunda fuerza con 13, detrás del PSD, que reclutó nuevos senadores en las últimas horas. “Nosotros no mandamos en el Congreso, nosotros dependemos del Congreso”, había declarado antes Lula.
Acusan a Bolsonaro de haber presionado para dar un golpe
Un senador conservador y militar brasileño aseguró ayer que el ex presidente Jair Bolsonaro buscó convencerlo para dar un golpe de Estado luego de su derrota electoral del año pasado con el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
“Este viernes va a salir en la revista Veja el intento de Bolsonaro de presionarme para que yo pueda dar un golpe de Estado junto a él”, afirmó anoche el senador Marcos do Val.
Luego, el senador declaró: “cuento esto para que ustedes tengan una idea (de la actitud de Bolsonaro) y es lógico que yo lo denuncie”.
Do Val dijo que estaba harto de presiones y decepcionado de la política y que, tras cuatro años como senador, presentará su renuncia al Parlamento, donde aún le restan cuatro años de mandato, para radicarse en Estados Unidos.