LA PAZ.- La propia Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó ayer una resolución que urgió a las autoridades bolivianas a convocar a “elecciones justas, libres y transparentes lo antes posible”. El texto aprobado por la mayoría de los miembros del organismo también exigió al Estado que garantice “de manera plena e irrestricta” el respeto y la protección de los derechos humanos y “la responsabilidad por cualquier violación de los mismos”, en un cuestionamiento directo al Gobierno de Áñez. De hecho, Uruguay intentó sin éxito sumar una enmienda que reconociera explícitamente que el país fue víctima de un “quebrantamiento institucional” cuando las Fuerzas Armadas presionaron a Evo Morales para que abandonara la Presidencia.
Simultáneamente, miles de personas se movilizaban desde distintas provincias bolivianas hasta Senkata para repudiar las muertes que dejó la represión del martes en la planta de abastecimiento de combustible, que la Defensoría del Pueblo elevó ayer a nueve personas, con más de 50 heridos. Al grito de “El Alto no está solo carajo”, los manifestantes se proponen llegar a La Paz para repudiar la represión de las fuerzas de seguridad, aunque genera profunda incertidumbre la posibilidad de que se produzcan nuevos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
La Defensoría del Pueblo, a su vez, confirmó que trepó a nueve la cantidad de fallecidos el martes y adelantó que todavía hay personas desaparecidas. “Estamos haciendo una convocatoria para que los familiares vengan, hagamos la denuncia en caso de desaparecidos y procedamos con la búsqueda”, detalló la defensora Nadia Cruz, quien aseguró que “la población en este momento lo que está pidiendo es justicia y está en su legítimo derecho (…): con la colaboración del Ministerio Público y peritos del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) se va proceder a hacer la autopsia para poder señalar cuál ha sido la causa de la muerte para que se diga la verdad”, enfatizó.
Ocurre que a pesar de que varios de los decesos fueron a causa de disparos, el ministro de Defensa, Fernando López intentó negar cualquier responsabilidad: “Me encantaría aclarar que del Ejército no salió ni un solo proyectil. Las Fuerzas Armadas se mantienen con la premisa del diálogo permanente”, aseguró. Lo cierto es que, con estos números, la cantidad de fallecidos desde que estalló la crisis en el vecino país hace un mes se eleva a 32, según cifras de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Por su parte, Áñez anunció ya por la mañana que, “si Dios lo permite, hoy vamos a lanzar la convocatoria a elecciones”. “Primero vamos a estar lo más apegado a la Constitución. Hemos elaborado un proyecto base de ley. Probablemente pueda ser corregido, consensuado, enriquecido por todos los sectores que están involucrados en la lógica de pacificar el país y de elegir a nuestros gobernantes”, aseveró por la tarde, al confirmar la presentación de la iniciativa en el Parlamento. La dirigente dijo que su idea es designar vocales electorales en un plazo de 15 días: “Será la Asamblea Legislativa la que tenga el trabajo de llevar adelante la elección de los vocales del Órgano Electoral Plurinacional y así, poder agendar un calendario electoral”, explicó, y señaló que el proyecto es un “documento base” que debe alcanzar un consenso nacional. “Lo vamos a hacer en conjunto con organismos internacionales y con todos aquellos que quieran enriquecer ese proyecto base que nos va a ser útil para todos los bolivianos”, enfatizó Áñez, quien confirmó que en caso de no alcanzar un consenso dentro del órgano Legislativo, podría convocar a los comicios mediante un decreto. El
proyecto presentado por Áñez fue en realidad el segundo del día: más temprano, el Movimiento al Socialismo (Mas) había presentado una iniciativa similar. Pero el ministro de Justicia, Alvaro Coimbra, salió a descartar el proyecto y aseguró que ni el ex presidente Evo Morales ni su vicepresidente, Álvaro García Linera, podrán ser candidatos en el nuevo proceso electoral.