Franco Mogetta, ex funcionario del Gobierno de Córdoba durante la administración de Juan Schiaretti, fue designado como secretario de Transporte del futuro gobierno del presidente electo, Javier Milei.
Mogetta tendrá como principales desafíos la revisión del sistema distribución de los subsidios y la actualización tarifaria, la licitación de la hidrovía, además del futuro de Aerolíneas Argentinas.
Mogetta, quien hasta ahora era el titular del área en el gobierno de Córdoba, participó este jueves en la primera reunión para ordenar la transición con las actuales autoridades y el designado nuevo superministro de Infraestructura, Gustavo Ferraro.
El hasta ahora funcionario cordobés y ex empresario del transporte en Catamarca, se sumó a la gestión pública durante el último mandato de Schiaretti y su designación forma parte de los acuerdos políticos entre el mandatario provincial y el presidente electo Javier Milei.
Mogetta presidió el Comité Federal del Transporte y mantuvo una relación conflictiva con los ministros de Economía, Sergio Massa, y de Transporte, Diego Giuliano, por los subsidios tarifarios para las líneas de colectivos del interior del país y el sistema de la tarjeta SUBE en la capital cordobesa.
Entre los principales desafíos que afrontará será la revisión del esquema de distribución de los subsidios para el funcionamiento de las líneas urbanas de colectivos, los cuales se destinan casi en un 85% a las empresas de la región metropolitana del AMBA.
También tendrá que implementar los nuevos ajustes en los cuadros tarifarios de los colectivos y trenes de pasajeros.
En su área también le tocará definir el futuro de Aerolíneas Argentinas, solucionar las concesiones vencidas como las de Ferroexpreso Pampeano, del Central Argentino y Ferrosur Roca, además de definir el futuro de la ferroviaria estatal que opera las redes cargueras de las líneas Belgrano, San Martín y Urquiza.
También deberá encargarse de encarrilar las provisorias extensiones contractuales de Metrovías, la operadora de la línea Urquiza y de Ferrovías, que opera el Belgrano Norte.
No menos importante será la definición de la política portuaria, con la demorada reprivatización de las terminales del puerto de Buenos Aires y además y una nueva licitación para adjudicar a operadores privados el dragado y balizamiento de la hidrovía Paraná-Paraguay.