El presidente del Banco Nación, el cordobés Daniel Tillard, confirmó ayer la decisión de impulsar la privatización de dicha entidad con el objetivo de «alcanzar eficiencia y mejorar la transparencia en la gestión». «La transformación en sociedad anónima es central para crecer, alcanzar eficiencia y mejorar la transparencia en la gestión del BNA», aseguró el ex titular del Banco de Córdoba.
Desde la cuenta oficial de X del Banco Nación, el funcionario de Javier Milei publicó una serie de consideraciones y el rumbo que tomará dicha institución. Al respecto, consideró que “en los últimos años, el BNA no priorizó su objeto de canalizar los depósitos y transformarlos en préstamos a favor de las PyMEs y las familias argentinas”.
Y agregó: “Efectivamente, las financiaciones a favor de empresas y familias se redujeron a sólo 21,20% sobre el activo total. Esto se debió a la política monetaria de los últimos años que impulsó a los bancos a invertir en Leliq (Letras de Liquidez del BCRA) y títulos públicos, desplazando el desembolso de préstamos”.
Asimismo, el titular de la entidad financiera más grande de la Argentina recalcó: “En ese contexto, el BNA restringió los préstamos y amasó un elevado nivel de liquidez. Las Leliq, los títulos públicos y el efectivo representan el 88,03% de los depósitos según su balance a septiembre 2023″.
Por su parte, Tillard criticó la alta mora de la gestión antecesora diciendo: “Además, en el BNA se evidencian deficiencias en las prácticas de crédito. El Banco registra indicadores de mora muy negativos. Los préstamos en situación irregular son el 7,40% del total y en los préstamos a las empresas la irregularidad es peor: alcanza al 11,70% del total”.
En su primer día hábil de gestión, dejó entrever el rumbo que tomará la entidad diciendo: “El reordenamiento económico de la Argentina generará un cambio sustancial del negocio bancario. El desempeño del BNA deberá basarse en el aumento de los préstamos a favor de las PyMEs y las familias, y en optimizar su funcionamiento”.
Cerró la publicación dejando en claro la voluntad de privatizar la entidad enfatizando que “la transformación en Sociedad Anónima es central para crecer, alcanzar eficiencia y mejorar la transparencia en la gestión del BNA. Un comienzo será reemplazar la sindicatura unipersonal actual a favor de una sindicatura colegiada de tres miembros como en todas las sociedades”.