La diputada nacional por Córdoba, Natalia de la Sota, volvió a tomar distancia ayer del oficialismo provincial que lidera el gobernador Martín Llaryora, al anunciar que votaría en contra del proyecto de ley ómnibus que se debatía anoche, al cierre de esta edición, en la Cámara baja.
Cabe recordar que sus pares del interbloque Hacemos Coalición Federal, Carlos Gutiérrez, Juan Brügge, Ignacio García Aresca y Alejandra Torres, sí acompañan la iniciativa impulsada por el presidente Javier Milei.
Al respecto, confirmaron que votarán en general la ley también denominada “Bases”, aunque habrá artículos en particular a los que se opondrán. Sobre el particular, De la Sota advirtió a través de la red social X que “la `Ley Bases´ propone ajuste y recortes que perjudican a los sectores más vulnerables. Afecta a las provincias y busca privatizar empresas públicas sin el debido debate legislativo. También, persigue cambios profundos en leyes que merecen un tratamiento serio y responsable”.
“Por todo esto, rechazo en general la propuesta del oficialismo y acompaño el dictamen de los diputados Mónica Fein y Esteban Paulon”, agregó. Por último, la hija del fallecido ex mandatario José Manuel de la Sota agradeció a su bancada de HCF por “la posibilidad de decidir con autonomía y respetar lo resuelto. Que sea siempre lo mejor para el país”.
Torres propuso cambios en la movilidad jubilatoria
A su turno, la diputada Torres (HCF) dio a conocer durante el debate una serie de “propuestas superadoras para cambiar la situación decadente en la que se encuentra la movilidad jubilatoria”. Sobre el particular, alertó que “dejar la actual fórmula de movilidad llevará a que en los próximos meses se profundice el deterioro de los haberes jubilatorios. En el mediano plazo además desestabilizará la macroeconomía”.
“Tenemos la responsabilidad de evitar estos daños. La oportunidad es ahora”, aseguró la también pareja del titular de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), el cordobés Osvaldo Giordano.
De acuerdo a lo explicado por Torres, “llevarlo a cabo implica dos puntos: 1) Iniciar en abril, luego de una última actualización en marzo con la vieja fórmula contemplando octubre, noviembre y diciembre, y 2) Aplicar en abril la inflación de enero así empalma con el ajuste de marzo que consideró variaciones hasta diciembre”. “Con esto no resolvemos el problema del sistema previsional. Pero evitaremos sumar más daños”, rescató la diputada.
A continuación, dijo que “mientras sigue pendiente el desafío de abordar el ordenamiento integral del sistema previsional que esperemos pronto abocarnos en el Congreso”. “Por eso voy a insistir en un cambio de regla que permita, por un lado, darles previsibilidad a los ingresos de los jubilados. Por el otro, evitar que en el mediano plazo el sistema previsional vuelva a generar una crisis fiscal”, detalló.
“La manera de lograrlo es simple y transparente. Disponer por ley que los haberes se actualicen mensualmente por el IPC”, concluyó Torres.