En la segunda audiencia del juicio contra Diego Concha por homicidio en ocasión de abuso sexual a Luana Ludueña, la madre de la joven fallecida, Cristina del Rosario Caminos, acusó al secretario de Seguridad y Prevención Comunitaria de la Municipalidad y ex jefe de Concha, Claudio Severino Vignetta, de haber querido ocultar los hechos. Además, Caminos declaró como primera testigo y narró el derrumbe anímico de su hija con una carta que dejó Luana.
La mujer relató con detalles cómo fue el hecho ocurrido dentro de un hotel, descripto en la acusación respecto de abuso sexual de Concha a Luana. Relató también que su amigo bombero Emiliano Conti culpó a Luana por acusar a Concha y la presionó insistentemente para que cambie su declaración.
De igual modo, la madre de Luana aseguró ante el jurado popular que cuando su hija se recuperaba de otro intento de suicidio, el jefe de Bomberos de Pilar, René Caravante, le pasó su teléfono para que hable ella y su marido con Vignetta. En ese momento, el ex jefe de Concha les dijo, según el relato de la madre, que no subieran a Luana a la ambulancia de Pilar porque él iba a enviarle una con mejor tecnología y les pidió: “Que no hablemos con nadie y que no hablemos con la prensa”.
Según el abogado de la familia, esta actitud resulta muy llamativa, ya que, al momento de esa comunicación de Vignetta con la familia de Luana, aún no se había formalizado la denuncia en el Polo de la Mujer. Por ello, se analiza si podría tratarse de encubrimiento u omisión de delito.
En otro tramo de su testimonio, Cristina leyó una carta que su hija dejó antes de su fallecimiento. “Perdón, mami, mi tristeza es enorme y no puedo recuperar mi vida. Perdón, perdón, perdón. Gracias por haber estado. Ya no voy a llorar todos los días. Perdón, te amo. Cuida a papi. Perdón por no poder salir de esta”, dice el mensaje que dejó Luana a su familia.
El juicio se realiza en la Cámara Tercera del Crimen de la ciudad de Córdoba, con el tribunal técnico integrado por sus vocales habituales, Gustavo Ispani (presidente), Ángeles Palacio de Arato y Leandro Quijada. En tanto, la acusación está a cargo de Jorgelina Gómez, fiscal de Villa Carlos Paz.