El nuevo ministro israelí de Exteriores, Gideon Saar, afirmó ayer que “hay avances” en las negociaciones de las últimas semanas para un alto el fuego en Líbano, con la mediación de Estados Unidos, y que Israel está “listo” para llegar a ese punto.
“Estamos trabajando con los estadounidenses en ello. Hay avances y estamos listos para progresar en esas negociaciones”, aseveró Saar, que asumió como jefe de la diplomacia israelí el pasado viernes, en sustitución de Israel Katz.
Saar aclaró que para avanzar en esas conversaciones, que de momento se han llevado a cabo de forma indirecta, Israel necesita garantías de que “Hezbollah no estará más en nuestra frontera norte hasta el río Litani, y que no podrá armarse de nuevo” tras la implementación del acuerdo.
Por otro lado, el colono y ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, dijo que tanto Gaza como Cisjordania les serán “arrebatados para siempre” a los palestinos, y celebró el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca como el momento idóneo para lograr la soberanía israelí sobre los ocupados territorios.
“Estábamos a un paso de aplicar la soberanía sobre los asentamientos en Judea y Samaria (Cisjordania), y ahora ha llegado el momento de hacerlo”, dijo Smotrich.
”Hoy existe un amplio consenso en la coalición y en la oposición (…) contra el establecimiento de un Estado palestino que pondría en peligro la existencia del Estado de Israel”, añadió en un discurso en el que también tildó de “nazis” a los miembros de Hamás y se opuso al fin de la guerra en Gaza.