El gobernador Martín Llaryora enviará esta semana a la Legislatura Unicameral el paquete de proyectos económicos para 2025, que incluye el Presupuesto, el Código Tributario y la Ley Impositiva Anual. El proyecto mantendrá los principales ejes que supo defender Juan Schiaretti y que luego reivindicó Llaryora, esto es, ahorro corriente y -en lo posible- superávit financiero o al menos equilibrio.
La iniciativa -como es habitual- deberá armarse con base en los presupuestos macro fijados por la Nación: inflación de 18,3%, dólar a 1.207 pesos al cierre del año y crecimiento de cinco por ciento, además de un superávit primario de 1,35% del PBI. En ese contexto, el Gobernador y todos los ministerios están abocados a terminar de definir los detalles de la norma que enviarán a la Unicameral.
Pese al hermetismo oficial, trascendió que uno de los principales cambios a aplicar en 2025 involucrará a la industria. Concretamente, en el Ejecutivo se comprometieron ante sectores industriales a que el mínimo no imponible para quedar exento del pago de la alícuota de Ingresos Brutos pasará de los 640 millones de pesos actuales a más de dos mil millones, siempre como monto anual.
Al mismo tiempo, se trata de facturación del año anterior, esto es que ese nuevo monto corresponde a 2024. Se trata de un planteo efectuado por los industriales que se quejaban porque, pese a la elevada inflación, el mínimo no se había actualizado en la misma línea. En ese contexto, la Provincia atenderá el pedido, según confirmaron fuentes de ambas partes.
Por lo demás, no habría mayores cambios respecto a Ingresos Brutos, clave en la recaudación provincial, reveló el diario Comercio y Justicia. En tanto, con relación al impuesto Inmobiliario, trascendió que el Rural subirá al menos el 140%, en línea con la inflación estimada para 2024. En paralelo, debutará un nuevo esquema de segmentación. Hasta ahora, había tres tramos que tenían que ver con el número de hectáreas del campo, entre otros indicadores.