El próximo 30 de junio se vencerá el contrato de muchos jugadores en el fútbol argentino y estaba la incertidumbre de saber qué pasará con aquellos que no pudieran asegurarse un nuevo vínculo.
Ante esta posibilidad, la Asociación del Fútbol Argentino (ATP) y Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA) decidieron que desde el 1 de julio y hasta fin de año, la entidad que preside Claudio Tapia se hará cargo de los sueldos (el salario mínimo, vital y móvil de cada categoría) de los jugadores que se queden sin club.
La decisión de jugar sin descensos en las próximas dos temporadas hará seguramente que los clubes no realicen grandes erogaciones y algunas instituciones apostarán a sus juveniles en lugar de renovar los vínculos de los jugadores que están a préstamo. No obstante, la mayoría de los futbolistas continúan en discrepancia con la medida y ya anticiparon que buscarán la manera de revertirla cuando el fútbol argentino vuelva a tener algo de normalidad. O una nueva normalidad”.