Nuestras noticias en las clases universitarias: el saludo y recuerdo de una lectora

Me pregunto si tal vez pertenecí en una época a un club- no fundado- de coleccionistas extraños. Mi rareza consistía en coleccionar breves textos de los diarios. De todas maneras, presumo que no era la única -claro está- con esta singularidad que me nació hace más de 20 años atrás y mucho más atrás todavía. Es más, creo recordar que siempre había alguien que tenía esta costumbre por ahí y se reservaba alguna noticia entre los libros en la que se contaba algo fabuloso, asombroso o excepcional, por supuesto.

Mi diario preferido en este tema, el que llevó la vanguardia y mejor confeccionaba “noticias breves”, debo admitirlo, era el diario “Hoy día Córdoba” que un soleado día llegó a mi puerta de manos del cartero que nos avisó que traían este diario nuevo y que, si se lo íbamos a encargar, ya que en el barrio había tenido amplia aceptación.

Evidentemente, pasó la prueba con creces cuando tuve ante mis ojos esas “micro- noticias” la mayoría insólitas, fuera del exigente pulso diario, más cercanas a la literatura y sobre todo al asombro. La idea que construían estas noticias es que, en algún cercano o remoto lugar del mundo, había pasado algo digno de quedar impreso en letras de molde- y mire Ud. de lo que uno se venía a enterar en tan pocas palabras. La mayoría de estas “micro noticias” además tenían un sutil colorcito humorístico.

Pero si nos vamos a poner formales en esto que estamos revalidando, habría que establecer qué cánones de la escritura, cumplían estos textos breves para atrapar a lectoras y lectores curiosos. Una de ellas, era que no se dejaba de cumplir a raja tabla, las reglas de la noticia con sus clásicas 5 o 6 preguntas: qué sucedió, dónde, cuándo, etc. Es más, si faltaba o era omitida alguna de las interrogaciones era por alguna razón que hacía al texto más jugoso o intrigante. Otra norma implícita era que nunca conocíamos el nombre del redactor, lo cual no quita que me hubiera gustado saberlo. De hecho, he aquí un homenaje a la labor de las buenas prácticas periodísticas y a las del escritor.

Otra pauta infaltable apuntaba por supuesto, al contenido, un digno contenido que era necesario hacer conocer a las lectoras y los lectores, aunque sea en breve, muy breve y que me daba mucha satisfacción leer como verán.

Noticias breves en el aula

Igual este entusiasmo tiene su sustento- no vaya a sospechar que era puro capricho de alguien que le gusta mucho leer-. Los textos hallados en el diario iban a parar derecho y sin escalas a la clase de lengua o literatura, en la escuela o en la Facultad o donde impartiera mis clases. Y allí es cuando confirmo que tampoco era la única, calculo que mis colegas que pueden estar leyendo este artículo pertenecen a este club- no fundado- sin saberlo. Proclamo además que este coleccionismo se hace extensivo al cuento breve con Augusto Monterroso a la cabeza. De hecho, este fabuloso escritor guatemalteco se atrevió a batir el récord de haber escrito el cuento más breve del mundo en 1959:

El dinosaurio

“Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”.

Este relato breve, aunque no parezca, cumple asimismo con las reglas de la estructura narrativa no le falta nada, pues una parte la construye el propio lector como quiera. El dinosaurio posee siete palabras y recién fue superado en el año 2005 por Luis Felipe Lomeli, con un cuento de cuatro palabras. Como sea, las noticias breves o “micro-noticias” y sus correlatos literarios el cuento breve o el “micro-relato” dignifican sin dudas el arte de la concisión.

Récord Frustrado

Se preguntarán, nobleza obliga, claro está: cuál de entre todas esas noticias breves me quedó un recuerdo imborrable. El texto sin autor se llama “Récord Frustrado” va aquí la noticia que he guardado tanto tiempo y ha formado parte de mis clases: “Un ciclista mexicano tuvo que abandonar el raid que había iniciado en su país cuando estaba a punto de batir un récord para el Libro de Guiness, porque tres hombres le robaron su rodado y otras pertenencias en cercanías de la ciudad rionegrina de General Roca. La víctima del robo fue identificada como Pancho Dino Manuel Márquez, de treinta y cuatro años de edad, quien aseguró que si hubiese llegado a Neuquén, que se encontraba a sólo cuarenta y cinco Kilómetros del lugar del asalto, habría cumplido su objetivo para el Libro de Guiness de récords mundiales”.

Recuerdo que esta noticia acechaba entre una pila de otras breves y las que ocupaban grandes espacios en el diario, pero no dejaron de darla, de escribirla, de allí su gran valor. Escribí este artículo porque me pareció que era un mínimo homenaje que le debía al diario “Hoy día Córdoba” y que mejor que hacerlo en su aniversario.

Stella Navarro Cima

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