La Conferencia Episcopal Argentina lamentó hoy la legalización del aborto y consideró que «ahondará aún más las divisiones» en el país.
«Esta ley que ha sido votada ahondará aún más las divisiones en nuestro país. Lamentamos profundamente la lejanía de parte de la dirigencia del sentir del pueblo, el cual se ha expresado de diversas maneras a favor de la vida a lo largos y a lo ancho de nuestra Patria», sostuvo el organismo eclesiástico.
A través de un comunicado, el purpurado local señaló que tiene la «certeza» de que el «pueblo seguirá eligiendo siempre toda la vida y todas las vidas», a la vez que remarcó que seguirá «trabajando por las auténticas prioridades que requieren urgente atención» en el país.
En ese sentido, enumeró: «Los niños y niñas que viven en la pobreza en cantidad cada vez más alarmante; el abandono de la escolaridad por parte de muchos de ellos; la apremiante pandemia del hambre y la desocupación que afecta a numerosas familias; así como la dramática situación de los jubilados, que se ven vulnerados en sus derechos una vez más».
Ese último punto es una alusión a la aprobación de la nueva fórmula de movilidad para el cálculo de haberes jubilatorios, de pensiones y asignaciones, impulsada por el Frente de Todos.
«Abrazamos a cada argentina y a cada argentino; también a los diputados y senadores que valientemente se han manifestado a favor del cuidado de toda la vida. Defenderla siempre, sin claudicaciones, nos hará capaces de construir una Nación justa y solidaria, donde nadie sea descartado y en la que se pueda vivir una verdadera cultura del encuentro», concluyó el organismo eclesiástico presidido por monseñor Oscar Ojea.
Escasas horas antes del comunicado de la CEA, el papa Francisco había ratificado su rechazo al aborto en su última audiencia general del año, ocasión en la que afirmó: «Todos nacemos porque alguien ha deseado para nosotros la vida».
Evangélicos consideraron que el país «retrocedió siglos de civilización»
La Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA) lamentó hoy la aprobación del proyecto de aborto legal y afirmó que por «el inmenso egoísmo del ser humano» el país «retrocedió siglos de civilización».
«Este tiempo de discusión sobre el poder de unos sobre la vidas de otros, ha mostrado una vez más el inmenso egoísmo del ser humano frente a otro ser humano desvalido, inocente y vulnerable. Sin lugar a dudas, hoy la Argentina retrocedió siglos de civilización y respeto al derecho supremo de la vida», sostuvo la entidad.
A través de un comunicado, ACIERA consideró que «la mayoría celeste no fue escuchada y mucho menos tenida en cuenta», aunque advirtió que «esa inmensa masa de personas que van por las dos vidas no claudica, sigue en pie».
«Seguiremos en el compromiso de atender a las mujeres más vulnerables, que lleguen a la decisión de abortar a sus hijos.
Las acompañaremos y también trataremos de que no tomen una decisión tan drástica. Respetaremos las leyes, como siempre lo hacemos. Pero seguiremos dando amor sin pedir nada a cambio, porque esa es nuestra esencia», añadió.
Al lamentar la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo, ACIERA expresó: «Quizás hoy tengamos un sabor amargo en nuestras bocas, pero las mismas bocas no callarán jamás cuando deban defender, cobijar, cuidar, amar, restituir, acompañar y sanar a quienes se arrepientan o no, de sus malas decisiones».
Las palabras del papa Francisco desde el Vaticano
Luego de que el Senado aprobara la legalización del aborto, el papa Francisco volvió a rechazar hoy la iniciativa y afirmó que todos nacen porque «alguien ha deseado la vida».
Al encabezar su última audiencia general del año, el Sumo Pontífice reiteró su visión en contra de la interrupción voluntaria del embarazo. «Todos nacemos porque alguien ha deseado para nosotros la vida», manifestó. Y añadió: «Para nosotros cristianos el dar las gracias ha dado nombre al Sacramento más esencial que hay: la Eucaristía.
La palabra griega, de hecho, significa precisamente esto: acción de gracias».
Durante la catequesis que brindó desde la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano, el Santo Padre remarcó que «los cristianos, como todos los creyentes, bendicen a Dios por el don de la vida».
«Vivir es ante todo haber recibido la vida. Todos nacemos porque alguien ha deseado para nosotros la vida», destacó Francisco.
De esta manera, el Papa reiteró su rechazo a la interrupción voluntaria del embarazo, que en la madrugada de este miércoles fue legalizada por el Congreso de la Nación.
Horas antes de que comenzara la sesión para tratar el proyecto el pasado martes, el Sumo Pontífice había remarcado su postura, aunque no había hecho alusiones a la Argentina.
«El Hijo de Dios nació descartado para decirnos que toda persona descartada es un hijo de Dios. Vino al mundo como un niño viene al mundo, débil y frágil, para que podamos acoger nuestras fragilidades con ternura», había publicado en su cuenta de Twitter.
En ese sentido, el pasado sábado el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Oscar Ojea, había encabezado una «misa por el cuidado y el respeto de la vida naciente» en la Basílica de Luján: en el tradicional santuario, el prelado había señalado que «no se puede ocultar el dolor ante el proyecto de ley», así como también había instado a los legisladores a realizar «una serena reflexión» y a que «no renieguen de sus convicciones más profundas».