A partir de los aumentos derivados de las negociaciones paritarias, en mayo los salarios de los trabajadores y empleados registrados le empataron a la inflación, pero arrastran en los últimos 12 meses una pérdida del 11,3%. Los datos oficiales indican que en el quinto mes del año los salarios registrados tuvieron un incremento del 3,2%, según el Ripte (Remuneración Imponible de Trabajadores Estables) que elabora el Ministerio de Salud y Desarrollo en base a los sueldos registrados de las empresas. Se trata de solo un 0,1 punto más que la inflación promedio de ese mes que fue del 3,1%, de acuerdo a los registros del Indec, analizó el economista Ismael Bermúdez. En promedio, el sueldo bruto registrado con aportes jubilatorios de ese mes fue de 40.911,09 pesos, mientras que un año atrás era de 29.338,79 pesos, lo que representa un incremento del 39,4%.
Sin embargo, en esos 12 meses la inflación sumó el 57,3%. Significa una pérdida del poder adquisitivo de los sueldos del 11,3%. Con relación a la canasta básica total, que ascendió al 61,1% la pérdida es superior. A su vez, el informe subraya que, por tratarse de sueldos brutos, se deben descontar los aportes de jubilación y salud (17%) con lo que el sueldo neto a mayo se reduce de 40.911,09 a 33.956,20 pesos. Por último, destaca que la caída es mayor si la comparación se extiende a diciembre de 2015, cuando el sueldo promedio era de 15.800,97 pesos. En ese caso se trató de un incremento del 158,9% versus una inflación del 209,4%, y representa una caída en términos reales del 16,3% con relación al inicio de la actual gestión.
En tanto, ayer se difundió que el ingreso necesario para que una familia de cuatro miembros supere la línea de pobreza alcanzó en junio los 31.148 pesos, de acuerdo a lo reportado por el Indec, producto de un alza de la Canasta Básica Total (CBT) del 2,7%. El avance arroja un acumulado de 22,4% para el primer semestre del año, lo que ubica a este umbral apenas por debajo de la inflación. No obstante, en la comparación interanual se da el fenómeno opuesto a raíz de un incremento del 58,9%, 3,1 puntos porcentuales por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC).