El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, manifestó ayer que los productores ganaderos tienen que “producir más” ya que los “problemas de la carne se solucionan con más carne”, e indicó que la relación de la entidad agraria con el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, es «buena”.
“Lo que tenemos que hacer nosotros es producir más. Los problemas de la carne se solucionan con más carne”, manifestó Pino en declaraciones radiales, a la vez que subrayó el consenso en la decisión de liberar parcialmente las exportaciones, luego de “muchas charlas con el Gobierno”. “El Gobierno escuchando los reclamos que teníamos nosotros con la exportación, propuso esto, y la realidad es que los que mandan y llevan adelante las decisiones del país es el Gobierno”, señaló el presidente de la SRA.
Tras ello, agregó: “Lo ideal para nosotros sería que la carne esté totalmente liberada para la exportación, máxime cuando está cubierto el consumo interno perfectamente con los volúmenes de carne que se producen, pero el Gobierno ha decidido ir por este lado que no es el ideal pero es lo posible y lo que se pudo hacer hasta este momento».
El Gobierno estableció el lunes un esquema en el que se mantiene suspendida hasta fines de 2023 la exportación de siete cortes parrilleros para garantizar el abastecimiento en el mercado interno, al tiempo que liberó de manera total los envíos de carne de vacas tipo D, E y toro, también denominadas de conserva o de manufactura.
La nueva disposición reserva para el mercado interno los cortes de alta demanda interna incluyendo el asado con o sin hueso, falda, matambre, tapa de asado, paleta y vacío, prohibiendo su exportación hasta el 31 de diciembre de 2023.
En tanto, se abre la exportación sin cupo de las “vacas de conserva y manufactura”, fruto de un pedido de las entidades agropecuarias, que se estiman en un total de 1,3 millones animales y que mayormente se envían a China, país que en la actualidad absorbe el 72,8% del total de los despachos del país, según datos de noviembre de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y derivados de la República Argentina (Ciccra).
Asimismo, Pino indicó que el diálogo del sector con el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, es “bueno” y que, pese a no compartir la “ideología” del Gobierno, el sector tiene que “convivir y seguir trabajando” en conjunto.
“Entendemos que este es un Gobierno que, por su estilo, su ideología, le gusta estar presente interviniendo en ciertos mercados como los de trigo, el maíz y la carne. No compartimos esta postura pero es el Gobierno, y tenemos que convivir y seguir trabajando”, expresó el dirigente rural. “Tenemos que buscar la mayor posibilidad de certezas para seguir trabajando de manera tranquila”, agregó.
Por su parte, el presidente de la Sociedad Rural se refirió al precio de la carne y consideró que el eje de la problemática es la inflación. “Me parece que le erramos en el diagnóstico sobre el precio de la carne; el punto de partida es la inflación que le pega a todos los argentinos en el bolsillo”, opinó.
El nuevo esquema de exportaciones forma parte del plan ganadero GanAr 2022/23, presentado por Domínguez el pasado mes de diciembre. El plan, que posee el objetivo de generar “previsibilidad y confianza” en el sector, comprende, además, el lanzamiento de líneas de créditos por $100.000 millones para lograr un aumento en la producción (con un mayor peso en los animales para faena y un mejor índice de destete), así como la creación de un organismo consultivo (el Observatorio de la Producción de la Carne Vacuna). Este ultimo, creado también ayer por resolución del Boletín Oficial, dará asesoramiento para impulsar la productividad y generar un buen clima de negocios en la cadena de la carne.