La desregulación de los precios en la economía nacional terminó por dar vuelta las brecha de valores existentes de los combustibles entre el interior del país y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba). Así lo señaló la Fundación Colsecor, que destacó que es la primera vez que se da vuelta desde que realizan el Relevamiento de Precios (RePre) de las naftas, el gasoil y el cemento en 32 localidades de siete provincias del interior del país.
De esta manera, tras la devaluación del tipo de cambio que aplicó el nuevo gobierno de Javier Milei ni bien asumió, y que llegó a casi 120%, y con la desregulación de los precios en general y de los combustibles en particular, los incrementos aplicados fueron tan dispares que la brecha se volvió negativa por primera vez.
Por lo que mientras en las 32 localidades relevadas por la fundación la nafta aumentó un 15,9% promedio ubicando su valor nominal en $ 423, en Caba llegó al 77,8%, es decir, $ 553, siendo el litro más económico en el interior.
En el caso del gasoil sucede algo similar, porque mientras en el interior el incremento al litro fue de 16%, es decir $ 450,6 promedio, en la Ciudad Capital la suba fue de 80,2% dejando su valor en $ 591 el litro, nuevamente más caro que en el promedio de las localidades relevadas.
Esas variaciones hicieron que la brecha, que desde los comienzos del monitoreo fueron positivas a favor de Caba, se volvieran negativas, con -24% para la nafta y el gasoil, y resultara más conveniente durante el mes diciembre cargar combustibles en el interior del país que en la Capital.
Por otro lado, en RePre también monitorean la evolución del precio de la bolsa de cemento portland de 50 kilos. Y pudieron confirmar que el comportamiento de los aumentos fue similar al de los combustibles. Mientras en el promedio de las localidades el incremento aplicado fue de 12,5%, en la Ciudad de Buenos Aires la suba llegó a 35%, dejando los valores nominales promedio en $ 4.858,48 y $ 7.360, respectivamente. Esta diferencia en los aumentos amplió aún más la brecha que históricamente fue en favor del interior y la convirtió en la brecha más amplia del año al alcanzar el 34% de diferencia entre ambos valores.