Este truco se conoce dentro del ejército estadounidense desde hace años y es efectivo para el 96% de los soldados. El ejecicio consta de dos etapas: una de relajamiento corporal y otra, mental.
Escaneo corporal
La primera parte de este método consiste en realizar una exploración del cuerpo. Relajarás todos los músculos de tu cuerpo uno a la vez.
Primero, relaja los músculos de tu cara: tu frente, alrededor de tus ojos, tu mandíbula y tu lengua. A continuación, suelta los hombros y deja que los músculos se relajen.
Dirige tu atención a tu brazo derecho, relaja los músculos de la parte superior del brazo, la parte inferior del brazo y la mano. Repite con tu brazo izquierdo.
Respira profundamente y deja que tu pecho se relaje.
Ahora relaja los músculos de ambas piernas. Ve de arriba abajo; primero relaja los muslos, luego las rodillas, las espinillas y finalmente los pies.
La segunda parte
Ahora que todos tus músculos están relajados, es hora de un espectáculo o, mejor dicho, de una visualización. Cierra los ojos e imagina una de las siguientes situaciones, según cuál te llame más la atención:
- Estás acostado en una hamaca negra en una habitación que está completamente oscura.
- Estás acostado boca arriba en una canoa, flotando en el agua. El agua está tranquila y el cielo sobre ti es de un azul brillante. No se ve una nube.
- Durante diez segundos, repite las palabras no pienses, no pienses, no pienses” en tu cabeza.
Si esto no funciona de inmediato, no te rindas. Puede llevar hasta seis semanas dominar este truco y será cada vez más fácil.