La escritora estadounidense Nancy Crampton Brophy, de 71 años, fue condenada el miércoles por haber matado a su marido en junio de 2018. Lo singular del caso es que ella había escrito tiempo antes una entrada en su blog titulada, justamente, «Cómo asesinar a tu marido».
En la entrada, Crampton Brophy describía los cinco motivos principales y las armas adecuadas que escogería si su personaje fuera a matar a su marido en una de sus novelas románticas.
Un jurado en Portland, Oregón, la halló culpable de asesinato en segundo grado por haberle disparado dos veces en el corazón su esposo, Daniel Brophy, quien entonces tenía 63 años.
El fiscal Shawn Overstreet dijo que la escritora pasaba penurias económicas antes del homicidio y presentó pruebas que mostraban cómo Crampton Brophy había planeado matarlo.
«No se trata solo del dinero. Se trata del estilo de vida que Nancy deseaba y que Dan no podía darle», dijo durante el juicio.
Crampton Brophy negó haber cometido el asesinato e insitió en que las imágenes de una cámara de seguridad que la ubicaron en la escena del crimen simplemente mostraban su búsqueda de inspiración para escribir.
También afirmó que un arma desaparecida que la policía cree que fue con la que se había cometido el homicidio la había comprado como parte de la investigación para una novela.
Negó, además, que los cientos de miles de dólares en seguros de vida que podía ganar fueran un motivo para el asesinato.
A su vez, rechazó las afirmaciones de penurias económicas cuando subió al estrado la semana pasada y dijo que sus problemas de dinero se habían resuelto mucho antes de la muerte de su esposo. «Me iba mejor financieramente con Dan vivo que como me va con Dan muerto», señaló.
«¿Dónde está la motivación, le pregunto? Un editor se reiría y diría: ‘Creo que debes trabajar más duro en esta historia, tienes un gran vacío'», le dijo la novelista al fiscal.
Ahora, Crampton Brophy se enfrenta a cadena perpetua. Sin embargo, su defensa apelará la condena cuando se haga pública, informó el periódico local The Oregonian.
En «Cómo asesinar a tu marido» la autora recomendó no contratar a un sicario porque muchos te «traicionan con la policía», ni confiar en que lo haga tu amante: «Mala idea».
Tampoco aconsejaba utilizar veneno porque se puede rastrear. «Después de todo», escribió en su blog, «si se supone que el asesinato me va a liberar, ciertamente no voy a querer pasar tiempo en una cárcel».
En «Cómo asesinar a tu marido», la autora también describía los métodos y los motivos para hacerlo, y entre ellos estaban el uso de armas de fuego y el tema económico. Aunque las armas, decía, son «ruidosas, desordenadas y requieren cierta habilidad».
«Pero lo que sé sobre el asesinato es que cada uno de nosotros lo tiene dentro de sí mismo cuando se nos empuja lo suficiente», seguía diciendo.
Además, en su blog había escrito: «Mi esposo y yo estamos en nuestro segundo (y último, ¡créanme!) matrimonio. Juramos… que no terminaría en divorcio. Pero, debo resaltar, que no descartamos el tiroteo desde un vehículo en movimiento ni un accidente sospechoso».