Jueves
- El Cineclub Municipal Hugo del Carril (bv. San Juan 49) estrenará el último largometraje del director Marco Bellochio. Se trata de “La conversión” (“Rapito”, 2023). En 1858, en el barrio judío de Bolonia los soldados del Papa irrumpen en la casa de los Mortara para secuestrar a su hijo de siete años, Edgardo. La niñera de esta familia había bautizado en secreto al pequeño, por lo que, de acuerdo con la ley papal, debía recibir una educación católica o ser considerado un apóstata. La película sigue la lucha de la familia para tratar de recuperar a su hijo ante esta acción de la Iglesia Católica. Las funciones serán a las 15:30 y a las 20:30. Esta última con entrada libre y gratuita. Repite el viernes a las 18 y 23, el sábado 15:30 y 20:30 y el domingo a las 18 y 23.
- La sala reestrenará la obra de María Aparicio “Las cosas indefinidas” (2023). Eva es una mujer de 50 años que se dedica a editar películas. Junto a su asistente Rami se encuentran trabajando en un largometraje sobre personas con ceguera. Mientras tanto, Eva parece haber perdido entusiasmo por el cine. A esto se suma la reciente muerte de su amigo Juan, un director de cine cuyas películas ella editaba. Se podrá ver a las 18 y a las 23. Repite mañana 15:30 y 20:30, el sábado a las 18 y 23 y el domingo en el horario de 15:30 y 20:30
Sábado
- El documental hindú “Mente de arcilla” (“Mati manas”, 1981) es una poética mirada sobre el milenario arte de la cerámica, desde una amplia variedad de perspectivas. El espectáculo se proyecta a las 19.
- Desde las 21 se podrá disfrutar de “Primer” (2004), la ópera prima de Shane Carruth. Cuatro amigos trabajan en un garaje construyendo aparatos altamente complejos. En parte por accidente y en parte por su pericia, descubren un mecanismo dotado de poderes que les permite conseguir casi todo lo que quieran, adelanta la sinopsis.
Domingo
- A las 20 iniciará “El asesino anda suelto” (“The killer is loose”, 1956). La obra de Budd Boeticher se ambienta en una pequeña ciudad. Allí, unos ladrones atracan un banco y se produce un asesinato que parece haber sido cometido por un apocado empleado de la entidad asaltada. Se trata de Leon Poole, que resulta ser el cómplice que había proporcionado a los ladrones la información necesaria para planificar el robo.