El árbitro Martín Bustos permanecerá en prisión durante tres meses luego de ser detenido por cometer el delito conocido como “grooming” en Rosario, al intentar contactarse con un menor de edad, que juega en las divisiones inferiores de Newell’s.
A ocho meses de haber sido liberado en la causa que investiga presuntos abusos con adolescente de las formativas de Independiente, Bustos fue denunciado por el club rosarino luego que el psicólogo de la institución tomara el rol del joven contactado y, tras seguirle el juego, pactara un encuentro donde la Policía de Investigaciones detuvo al referí.
Newell’s, que presentó la denuncia en la Unidad de Delitos Sexuales de Rosario, informó que la amenaza, que llegó a través de las redes sociales, fue detectada a tiempo gracias a los profesionales del equipo de psicología del club, quienes mantienen un protocolo para este tipo de situaciones. Pese a ser puesto en libertad, Bustos continúa investigado por “corrupción de menores”.