Otra integrante de los equipos de salud que enfrenta a diario la pandemia del Covid-19 recibió una amenaza por parte de sus vecinos para que se mudara del edificio donde residía. Se trata de la enfermera Cristina Fuentes, quien habitaba un departamento de barrio Centro de nuestra ciudad, donde una inquilina subalquilaba las habitaciones.
Por el contexto de crisis ante las medidas de confinamiento obligatorio para contener la pandemia, las personas que rentaban la pensión informal debieron dejar sus habitaciones ante la falta de trabajo. La enfermera, por el contrario, empezó a tener más actividad laboral y siguió cobrando y abonando el alquiler de la habitación. Trabaja más de 12 horas por día en distintos hogares, cuidando niños y niñas con enfermedades graves.
Cuando los vecinos tomaron conocimiento de la profesión de la mujer, reaccionaron de la peor manera. La insultaron, la agraviaron y la amenazaron para que se retirara del edificio. Finalmente, le dejaron un mensaje con graves amenazas: Sabemos que te vas. Ya era hora!!! Nos ibas a matar a todos, enfermera de mierda (sic). El 1A iba a ser prendido fuego”. Ante estos hechos, la enfermera tuvo que mudarse a la casa de un amigo.