El terrible fantasma agitado por el presidente norteamericano Joe Biden para justificar su rechazo a ampliar la misión en Afganistán no tardó en hacerse realidad: dos atacantes suicidas con explosivos y hombres armados con fusiles del Estado Islámico (EI) arremetieron ayer contra la multitud en la entrada del aeropuerto de Kabul, donde mataron al menos a 12 militares estadounidenses e hirieron a otros 18, dentro de un saldo aún no definido de decenas de fallecidos, entre ellos niños, en los últimos días del masivo operativo de evacuación que había atraído al lugar a miles de extranjeros y afganos que quieren salir de Afganistán tras la toma de poder talibán.
Los ataques suicidas llegaron en medio de un clima de advertencias de las potencias occidentales que temían atentados en el aeropuerto de la capital afgana por parte del grupo yihadista EI, que en Afganistán tiene su propia vertiente formada por ex talibán.
Anoche, el EI reivindicó el ataque, que habría dejado al menos 73 muertos y 140 heridos. Las explosiones ocurrieron a media tarde, y pronto se divulgaron en las redes imágenes de decenas de cuerpos ensangrentados y mutilados en un canal con agua situado en la periferia del aeródromo, donde muchos civiles llevaban días intentando que las fuerzas de seguridad se apiaden de ellos y les permitan entrar.
Cuando la gente escuchó la explosión el pánico fue total”, narró un testigo presencial. Más de 60 afganos murieron y otros 140 resultaron heridos”, agregaron fuentes oficiales, que pidieron anonimato. Además, aseguraron, la mayoría de los heridos que están recibiendo atención médica se encuentran en estado crítico”, por lo que el número de fallecidos podría aumentar en las próximas horas.
El general Kenneth F. McKenzie, jefe del Comando Central de EE.UU., detalló que los atacantes suicidas detonaron sus explosivos cerca de Abbey Gate, la puerta principal de ingreso al aeropuerto, y en el cercano Baron Hotel. Además, varios hombres armados del EI abrieron fuego contra civiles y fuerzas militares. Poco después de los ataques, varios medios extranjeros reportaron otras dos explosiones en la capital afgana, pero el vocero talibán, Zabihullah Mujahid, descartó que fueran atentados y dijo que fueron explosiones controladas de las fuerzas estadounidenses para destruir municiones.
McKenzie advirtió que esperan que los ataques del EI continúen”, aunque adelantó que no pedirá refuerzos ni suspenderá las evacuaciones, que el propio presidente Joe Biden ratificó que terminarán el 31 de agosto. No perdonaremos, no olvidaremos, los cazaremos y los haremos pagar”, dijo el mandatario demócrata (ver Biden…). Por su parte, los talibán -que controlan los alrededores del aeropuerto-, condenaron los ataques y dijeron que tuvieron lugar en una zona donde la seguridad está en manos de las fuerzas estadounidenses”.
El Estado Islámico se atribuyó el doble atentado en Kabul
KABUL.- El Estado Islámico (EI) se atribuyó ayer el doble atentado que provocó una matanza en las inmediaciones del aeropuerto de Kabul, donde en los últimos días se concentra la evacuación de quienes quieren huir del país tras la toma del poder por los talibán. La rama afgana del EI reivindicó el atentado y precisó que un atacante suicida, a quien identificaron, detonó un chaleco explosivo entre los afganos y las fuerzas estadounidenses.
Esto coincide con lo relatado por el general Kenneth F. McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, que responsabilizó a la milicia extremista del ataque en el que 13 militares norteamericanos murieron y otros 18resultaron heridos (ver principal). Estos ataques fueron los primeros de su tipo contra civiles afganos y ciudadanos extranjeros desde que los talibán reconquistaron el poder en Afganistán al tomar Kabul el 15 de agosto pasado, coronando una vasta ofensiva lanzada en mayo.
Un especialista pide cuidar al pueblo afgano
Durante los 20 años de presencia estadounidense en Afganistán, los talibán dialogaron con las organizaciones humanitarias y confío en que eso seguirá, estamos a la espera de ver cómo terminan de formar el Gobierno”, afirmó el abogado argentino Ezequiel Heffes, quien vivió un año en ese país trabajando para el Comité de la Cruz Roja y ahora sigue con la ONG Geneva Call, que se dedica a mediar en conflictos armados.
Es importante que la comunidad internacional no tome decisiones que afecten al pueblo afgano”, destacó el especialista, quien aseguró que los talibán dijeron que quieren que las organizaciones humanitarias se queden, que iban a garantizar seguridad”.
Numerosos medios de comunicación dicen que (los talibán) son lo mismo que en el ‘96, pero yo tomaría eso con cautela porque el contexto internacional es distinto, el grupo (talibán) es distinto. Creo que en un par de meses vamos a ver cómo se traducen estos diálogos”, agregó.
Biden: No perdonaremos, los cazaremos
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden (foto), condenó ayer el doble atentado cometido por el Estado Islámico (EI) en la capital de Afganistán y prometió represalias para los responsables.
«Para los que cometieron este ataque: no perdonaremos, no olvidaremos, los cazaremos y los haremos pagar. Defenderé a mi gente y nuestros intereses con toda la fuerza que tengo”, prometió el mandatario norteamericano en un mensaje a la nación, donde agregó: Responderemos en nuestro tiempo con la fuerza y en el lugar que decidamos”.
El mandatario destacó que no hay evidencias de que haya habido una connivencia entre los talibán y el EI” y reconoció que en este momento tanto su Gobierno como el movimiento islamista tienen un interés común”: que Estados Unidos se retire el 31 de agosto y abandone el último punto que controla en el país, el aeropuerto internacional de la capital.