El drama de cientos de miles de ucranianos encerrados por la guerra encontró finalmente un tibio respiro ayer cuando comenzaron a ser evacuados de una ciudad asediada por las fuerzas de Rusia, que anunció una nueva tregua humanitaria para hoy, mientras intensifica simultáneamente la embestida en puntos clave del país.
De hecho, la apertura del primer “corredor humanitario” para evacuar civiles de la ciudad de Sumy, en el noreste del país, se produjo luego de que un bombardeo ruso dejara al menos 21 civiles muertos, en otra noticia que conmocionó al mundo. La ONU actualizó incluso ayer sus cifras de muertos e informó de 406 civiles asesinados en Ucrania por la invasión, pero dijo que la cifra real seguramente era mucho mayor, mientras el Ministerio de Defensa de Ucrania documentó 38 niños entre al menos 400 muertos confirmados, y 70 menores de edad heridos sobre un total de 800.
En ese contexto atroz, tras 13 días de invasión y después de tres intentos fallidos de establecer un alto el fuego para abrir corredores humanitarios, los primeros canales reales para evacuar civiles se iniciaron ayer en Sumy (localidad de 269.000 habitantes) e Irpin (ciudad dormitorio de Kiev con 60.000 censados), muy castigadas por las bombas.
Así lo confirmaron las autoridades ucranianas y organismos internacionales como la Cruz Roja. Sin embargo, medios de prensa denunciaron luego que, poco después de que los primeros autobuses partieran colmados de personas desesperadas por salir de esas ciudades, los disparos se reiniciaron, paralizando la evacuación. Rusia anunció también la apertura de otros corredores humanitarios en Kiev, Jarkov y Mariupol, que no fueron confirmados.
Por la tarde, el Ejército ruso anunció una nueva tregua humanitaria para hoy con el objetivo de seguir evacuando civiles de las zonas candentes, a partir de las 7 de la mañana (2 de Argentina), pero la proposición debía ser confirmada aún por las autoridades ucranianas. Cientos de miles de civiles están atrapados en ciudades que se están quedando sin agua, alimentos, electricidad y medicamentos en medio del más vasto conflicto bélico terrestre en Europa desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
La ONU informó que más de 2.000.000 de personas ya huyeron del país en menos de dos semanas de conflicto, un éxodo que calificó como el más acelerado de la historia europea. Más de la mitad de ellos se encuentran en Polonia (1.204.403), de una población total de 44 millones, mientras que otros países vecinos como Rumanía, Hungría, Eslovaquia y Moldavia también se convirtieron en refugios temporales y unas 153.000 ya se trasladaron a otras naciones en Europa.