El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, confirmó que el debate con Estados Unidos sobre las garantías de seguridad pedidas por su país quedó reservado para después del 10 de enero.
De cara a esa fecha, el Kremlin intenta conformar una agenda de negociaciones con la totalidad de la Otan, en una reunión prevista dos días después, para el 12 de enero, en la que presionará para que esa alianza se abstenga de incorporar a Ucrania y Georgia.
La iniciativa rusa prevé la creación de una línea directa con la Alianza Atlántica para contactos de emergencia e intercambio de información sobre maniobras militares. Además, Rusia instaría a EE.UU. a renunciar recíprocamente al despliegue de armas nucleares fuera del territorio nacional.
