Las autoridades ucranianas advirtieron ayer que no logran restablecer los medios de control de la radiactividad en Chernóbil tras la ocupación de los soldados rusos, quienes crearon una red subterránea cuando tomaron el edificio donde ocurrió el peor accidente nuclear de la historia.
“El sistema para controlar el nivel de radiactividad en la zona prohibida sigue sin funcionar”, declaró Evguen Kramarenko, jefe de la agencia estatal encargada de Chernóbil.
“Los servidores que manejan esta información desaparecieron (…) no podemos afirmar si (la zona) es completamente segura”, añadió y advirtió que “mientras no se restablezca la electricidad y los empleados no tengan autorización para acceder a los puestos de control de la radiactividad, no podemos evaluar los daños sufridos”.
También reveló que “los ocupantes rusos cavaron en múltiples lugares” en Chernóbil, donde “enterraron equipos pesados, crearon trincheras e incluso instalaron cocinas subterráneas, tiendas de campaña y fortificaciones”.