Ucrania aseguró que el 99% de los más de 400 cuerpos exhumados en fosas comunes cerca de Izium, una ciudad recuperada tras la ocupación de las fuerzas rusas, presentaban «señales de muerte violenta», y la ONU ya anticipó sus planes de enviar un equipo de investigadores para verificar este tipo de denuncias que en el pasado fueron rechazadas por el Kremlin.
«Hay varios cuerpos con las manos atadas por la espalda y una persona fue enterrada con una cuerda en torno al cuello. A todas luces, estas personas fueron torturadas y ejecutadas», afirmó Oleg Synegubov, gobernador de la provincia de Jarkov, en la que se encuentra Izium.
Según él, «450 cuerpos de civiles con marcas de muerte violenta y de tortura fueron enterrados», y acompañó su mensaje con unas fotos de cientos de tumbas halladas cerca de la localidad.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, también subió imágenes del lugar y acusó a Rusia de ser «un país terrorista». «Liberamos Izium. Se encontraron más de 400 tumbas en el bosque cercano. No se sabe cuántos ucranianos torturados hay allí», afirmó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Synegubov afirmó que «también había niños» entre los cuerpos exhumados por los «200 agentes y expertos» que están trabajando allí. «Se enviarán los cuerpos para que se realice una autopsia y así determinar la causa exacta de los decesos», explicó. «Cada muerte será investigada por separado y se convertirá en una prueba de crímenes de guerra de Rusia ante los tribunales internacionales», agregó
Moscú ya había sido acusada de crímenes de guerra, supuestamente cometidos en Bucha, cerca de Kiev, en las primeras semanas del conflicto, pero las autoridades rusas siempre rechazaron esas acusaciones.
Repudio e investigación de las muertes
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos indicó que planea enviar un equipo de investigadores para verificar las denuncias realizadas por las autoridades ucranianas.
Elizabeth Throssell, portavoz del Alto Comisionado, recalcó la importancia de «determinar las circunstancias de la muerte de las personas que podrían encontrarse en estas fosas comunes».
La vocera indicó que, cuando se hallan estas tumbas, es importante comprobar si se trata de militares o civiles, si fueron asesinados, si murieron en los combates o por causas naturales debido a la falta de atención médica.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, avaló la denuncia realizada por Ucrania y acusó a Rusia de actuar de manera «horrible».
«Se ve y se repite cada vez que la marea rusa se retira de partes de los territorios que ocupaba en Ucrania. Se ve lo que deja a su paso», declaró el funcionario, que hizo un llamado a las autoridades ucranianas para que documenten «estas atrocidades» y enfatizó que en «muchos casos se tratará de crímenes de guerra».
La Unión Europea (UE) también se mostró «profundamente consternada» por la denuncia de los cuerpos enterrados cerca de Izium, y «condenó firmemente esas atrocidades», declaró el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
«La guerra de agresión de Rusia contra Ucrania dejó un reguero de sangre y destrucción […] Rusia, sus dirigentes políticos y todas las personas implicadas en las violaciones continuas del derecho internacional y del derecho humanitario internacional en Ucrania deberán rendir cuentas», consideró el español en un comunicado.
Putín sigue con su plan militar
El presidente ruso, Vladimir Putin, no se refirió al tema al participar de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai, en Uzbekistán, pero sí dijo que su país no tiene «prisa» en terminar su campaña militar en el territorio vecino.
«Nuestras operaciones ofensivas, en el Donbass, no se detienen, avanzan poco a poco», declaró Putin en referencia a la región del este de Ucrania en la que vive una mayoría prorrusa y que concentra gran parte de los territorios conquistados por Moscú desde la invasión.
«Subrayo que no estamos combatiendo con todo nuestro ejército. Combatimos solo con la parte que tiene contrato (profesional)», añadió durante una rueda de prensa. El Kremlin prohibió oficialmente el envío de reclutas al frente y rechaza llevar a cabo una movilización general en el país. «El plan (de las operaciones) no necesita cambios […] no tenemos prisa», sostuvo, según citó la agencia de noticias AFP.
El mandatario afirmó que las operaciones continuaban su curso pese a las importantes contraofensivas del ejército ucraniano en el noreste y en el sur del país. «Las autoridades de Kiev anunciaron que habían empezado una contraofensiva […]. Veremos cómo termina», comentó Putin.
Según él, el objetivo clave del Kremlin sigue siendo «la liberación de todo el territorio del Donbass», la cuenca minera del este de Ucrania formada por la región de Lugansk -en manos del ejército ruso- y la de Donetsk, parcialmente ocupada por Moscú.
Previamente, el líder ruso compartió una bilateral con el primer ministro de la India, Narendra Modi, quien le planteó la importancia de «la democracia, la diplomacia y el diálogo». «Excelencia, sé que ahora no es el momento de hacer la guerra», expresó el premier, según imágenes difundidas por el canal público indio Doordashan.
Putin había reconocido que China, socia al igual que India del grupo de los Brics, había expresado «preocupaciones» por el conflicto. En ese sentido, el jefe de la diplomacia estadounidense refirió hoy también a que Rusia está bajo «presión» después de sus aliados.
«Creo que lo que está escuchando de China, de India, refleja las preocupaciones en todo el mundo sobre los efectos de la agresión rusa en Ucrania, no solo en el pueblo ucraniano», dijo Blinken a periodistas. «Creo que aumenta la presión sobre Rusia para que ponga fin a la agresión», añadió.
Gran parte de esta tensión política se reflejará la semana que viene durante los discursos de líderes y jefes de Estado que tendrá lugar en la Asamblea General de la ONU.
Zelenski podrá hablar por video con un mensaje pregrabado desde Kiev, según una excepción aprobada hoy en la organización con escasos rechazos, entre ellos el de Rusia.
Apenas seis países acompañaron a Moscú en la negativa a permitir que Zelenski hablara desde su país, mientras que 101 representaciones se pronunciaron a favor de que el mandatario ucraniano «presente una declaración pregrabada».
El discurso del mandatario está programado para la tarde del miércoles, pero está abierta la chance de cambios en la agenda porque muchos líderes viajarán el lunes a Londres para el funeral de la reina Isabel II.