El presidente Alberto Fernández pronunció hoy un extenso discurso contra la corrupción y pidió ser «inflexible» ante «los vicios de la función pública». Lo hizo en el Museo del Bicentenario de Casa Rosada, desde donde encabezó la presentación de la Mesa Nacional de Integridad y Transparencia.
«Me voy a descansar en paz», sostuvo con tono de despedida, parafraseando una estrofa de la canción «Días de conflicto» de Litto Nebbia, y agregó: «Saber que no somos cómplices de un desfalco eso nos permite dormir en paz cada noche y tener la conciencia limpia».
Acompañado por el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, el mandatario le pidió a los auditores presentes que colaboren para que «los que se sientan tentados a corromperse se vean impedidos a hacerlo».
Asimismo, reveló que cuando termine su mandato, el 10 de diciembre de 2023, presentará ante los medios de comunicación su declaración jurada para «que todos vean que hay un presidente y muchos funcionarios que se van a su casa igual que cuando llegaron».
«Ninguno se va más enriquecido, no somos amigos de empresarios, no le entregamos obras a nuestros amigos, no hicimos nada de eso e hicimos muchas cosas por la integridad y calidad ética del gobierno», desarrolló.
Para el mandatario, la corrupción no es patrimonio del Estado sino «un problema de la sociedad» que ve «en el curro» una posibilidad de acción.