Tal como el Frente de Todos (FdT), Juntos por el Cambio (JxC) aprovechó el cimbronazo político que generaron las acusaciones contra la vicepresidenta Cristina Fernández en la causa Vialidad para postergar los conflictos internos que sacuden a la coalición y mostrar un frente unido.
En efecto, con la significativa ausencia del ex presidente Mauricio Macri –que se ausentó por un “compromiso”- y de Elisa Carrió –que originó la última crisis interna en el espacio-, los integrantes de la Mesa Nacional de JxC se reunieron ayer en Capital Federal para mostrar una foto de unidad frente al terremoto judicial que sacude al oficialismo, que se convirtió en el tema central de la cumbre.
Al cierre del encuentro, emitieron un comunicado titulado “Lo que ocurre en el país es la consecuencia de años de corrupción kirchnerista”, donde rechazaron lo que calificaron como una “embestida” de funcionarios y militantes oficialistas a jueces y fiscales, luego de que Diego Luciani y Sergio Mola pidieran una pena de 12 años de prisión para la ex mandataria.
“Exigimos que se los cuide y proteja ante cualquier intento de desestabilización. El avance de la justicia es el resultado de la corrupción sin precedentes llevada adelante por el kirchnerismo”, insistieron en el texto, firmado por Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal por el PRO; los radicales Gerardo Morales, Alfredo Cornejo y Martín Lousteau; Maximiliano Ferraro y Juan López por la Coalición Cívica y Miguel Pichetto por el Peronismo Republicano.
Allí, los referentes de JxC rechazaron además “las convocatorias que realizan dirigentes políticos afines al kirchnerismo para movilizar a la sociedad, generando más violencia y atacando a la independencia del Poder Judicial”. “Creemos que es momento de que todos los actores de la sociedad hagan su aporte para sostener la paz social, más aún en este contexto de un agravamiento de la crisis económica”, completaron.
Piden investigar a Máximo Kirchner
Hace dos semanas, en medio de loa alegatos del juicio de Vialidad, el nombre de Máximo Kirchner salió por primera vez en el proceso contra su madre por presunta corrupción en la obra pública de Santa Cruz.
Fue a raíz de una serie de mensajes que se extrajeron del celular de José López donde se le consulta al diputado (que por entonces no ocupaba ningún cargo) dónde debían ubicarse cien cuadras de pavimento que terminaron en manos de Lázaro Báez.
Para el fiscal Diego Luciani esos mensajes en los que también aparecen otros funcionarios significaron una “clara intervención” en ésa y otras obras volcadas a la provincia.
Por eso, en la última audiencia, el fiscal Luciani solicitó que se realice una extracción de testimonio para investigar nuevos hechos. Es un pedido para que se abra otra causa judicial esta vez para investigar a Máximo Kirchner. La palabra final sobre esa nueva causa la tendrá el Tribunal a la hora de dictar su veredicto.
Por otro lado, no se conoció aún que hayan solicitado investigar otros vínculos de López con empresarios ligados al macrismo que aparecen en su celular, incluso con mayor frecuencia, como Nicolás Caputo.
Recusaron al juez Mahiques
La querella de los familiares de las víctimas del submarino ARA San Juan recusó ayer al juez de la Cámara Federal de Casación Penal Carlos Mahiques, al considerar que el magistrado tiene vínculos estrechos con el principal procesado, el ex presidente Mauricio Macri, e intervino en otras demandas en las que él fue parte.
“En ocasión de juzgar y sobreseer al entonces jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri, por la represión en el Hospital Borda, el juez recusado revestía el cargo ante la Cámara de Casación Criminal” en referencia a los hechos ocurridos en 2015, argumentaron los familiares, que recordaron que Mahiques fue nombrado como ministro de Justicia de Buenos Aires por María Eugenia Vidal y luego designado por Macri en Casación Penal a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia.
Reclaman expulsar a un diputado
La diputada nacional Hilda Aguirre (FdT) pidió la expulsión de la Cámara Baja de Francisco Sánchez (PRO), el legislador neuquino que había pedido la pena de muerte para Cristina Kirchner en la causa Vialidad.
A través de una carta, Aguirre solicitó la “expulsión” de Sánchez porque es conocido por sus posiciones “misóginas y violentas”.
“Esta vez cruzó el límite del odio y la provocación, pidiendo públicamente la pena capital para una de las principales figuras políticas del país, vicepresidenta de la República y lideresa del partido en el Gobierno”, argumentó.
“12 años por robar impunemente es casi nada. El año pasado presenté un proyecto de ley para que este tipo de delitos sean considerados traición a la Patria. Merecen la pena de muerte, no una liviana prisión domiciliaria”, había afirmado Sánchez.