El candidato presidencial de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, volvió hoy a negar la existencia de 30.000 detenidos desaparecidos como consecuencia de la represión ejercida durante la última dictadura militar y sostuvo que esa cifra no puede ser considerada parte de un consenso de la democracia porque, a su criterio, «mentir el número es grave» y «una aberración».
Tal como hizo anoche durante el debate presidencial en la ciudad de Santiago del Estero, Milei opinó que «no se puede construir desde la mentira» y que referir una cifra diferente a la de 30.000 detenidos desaparecidos «no es negar sino buscar la verdad».
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«Hay cuatro estimaciones de cifras y yo tomé la más alta de todas para que no haya cuestionamiento de ningún tipo», dijo Milei acerca del número de «8.753» desaparecidos que pronunció en el debate y mereció las críticas de dirigentes políticos y defensores de los derechos humanos.
En declaraciones a Radio La Red y el canal C5N, el candidato de LLA mencionó que «por respeto a las víctimas» de la dictadura, la cifra de desaparecidos que pronunció «fue la única» que no redondeó.
El número de 30.000 detenidos desaparecidos «no es un consenso», afirmó Milei, y agregó: «Dos más dos es cuatro. Si te negás a que dos más dos no es cuatro, sino un número distinto, es una aberración. Mentir el número es grave. No se puede construir desde la mentira. No es negacionismo, sino buscar la verdad», reiteró.
El postulante presidencial de LLA insistió en referirse como «excesos» a las violaciones a los derechos humanos y los delitos de lesa humanidad perpetrados durante la última dictadura.
«El Estado tiene el monopolio de la violencia aun cuando va a una guerra con formaciones irregulares. Eso no habilita que pueda cometer excesos y esos excesos tienen que ser condenados, por lo tanto no hay ningún negacionismo», consideró Milei.
Sin embargo, añadió que «también tienen que ser condenados los terroristas» sobre la base de un argumento legal utilizado, según mencionó, contra civiles durante el Juicio de Núremberg llevado a cabo tras la Segunda Guerra Mundial.
«Una de las cosas a las que adhiero es a la idea de Memoria, Verdad y Justicia, pero sobre todas las cosas no podés cerrar las heridas del pasado sin mentís sobre el número de desaparecidos», afirmó.
Y continuó: «Si es doloroso un caso (desaparición de personas), imaginate agregarle 22.000 casos. Hay que ser parecidos. No se puede hacer politiquería barata. No es negacionismo, sino la única forma de curar las heridas», insistió.
Por otro lado, Milei se consideró el triunfador del debate y opinó que el «peor desempeño de todos» lo tuvo la candidata de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich.
«Todas sus argumentaciones eran simples intenciones de deseo. No estaban bien articuladas. La gran perdedora fue Bullrich», analizó.
Para Milei, la candidata de JxC fue la «peor por escándalo» porque «no pudo concretar ninguna propuesta ni justificar nada. Cada vez que se le preguntó algo hizo agua; la vi muy floja, nunca explicó cómo piensa bajar la inflación», insistió.
Consultado sobre la crítica contra su persona expresada por la candidata del Frente de Izquierda, Myriam Bregman, quien lo trató de «gatito mimoso del poder económico», Milei dijo que «es una linda chicana pero no se condice con los hechos».
En otro orden de cosas, el candidato presidencial de LLA evaluó que la difusión de fotos y videos del exjefe de Gabinete bonaerense Martín Insaurralde con una modelo a bordo de un yate en la ciudad española de Marbella representa «un letrero gigante que dice ‘Milei tiene razón'».
«Toda su vida (Insaurralde) ha vivido del Estado y no puede llevar la vida de un magnate. Es una clara manifestación de la casta chorra, parasitaria e inútil que nos hunde a los argentinos», sostuvo.