El juez federal Julián Ercolini procesó hoy al ex presidente Alberto Fernández por los delitos de lesiones leves agravadas por violencia de género (reiteradas en dos oportunidades), lesiones graves y amenazas coactivas, en la causa en la que fue denunciado por la ex primera dama Fabiola Yañez.
Ercolini ordenó además un embargo sobre los bienes de Fernández por 10 millones de pesos.
Alberto Fernández fue procesado por dos episodios de violencia específicos: un golpe de puño en el ojo derecho a Fabiola Yañez, que ocurrió entre la noche del 21 de junio de 2021 y la madrugada del 22 de junio de 2021 en la suite presidencial de la Quinta de Olivos, que le produjo a la exprimera dama un hematoma visible que persistió por varios días.
Y el segundo hecho ocurrió meses antes del 12 de agosto de 2021, cuando Alberto Fernández sujetó fuertemente del brazo derecho a Fabiola Yañez, provocándole una lesión que derivó en un hematoma. Este incidente ocurrió en la Quinta de Olivos, cuando Yañez le anunció que quería irse del lugar con su hijo.
A estos episodios se suman las lesiones psicológicas y las amenazas para que no lo denuncie en la Justicia.
El juez sostuvo en su fallo que el ex presidente ejerció violencia psicológica y física contra Yañez a lo largo de su relación. Esto incluyó “acoso, hostigamientos, controles, indiferencia, insultos, culpabilización, destrato, retiro de la palabra, ninguneos y hostilidad”, sostuvo Ercolini.
El juez dijo además que Fernández ejerció un “condicionamiento económico” como medio para “manipular y continuar ejerciendo poder y control” sobre Yañez.
Según Ercolini, Fernández intentó coaccionar a su ex pareja para que no presentara cargos, prometiéndole que “en el futuro no les faltaría nada ni a ella ni a su hijo” y amenazándola con “arruinarla” y “hacer cualquier cosa en su contra”, si ella declaraba contra él.
Las pruebas que cita el fallo son las que recogió el fiscal Ramiro González en la instrucción del caso e incluyen la “grabación de la audiencia del 28 de junio de 2024”, en la que Yañez relató lo sucedido; un “informe de extracción” de imágenes de su celular; “imágenes del chat” entre ambos, y las fotografías del ojo golpeado de la ex primera dama y de sus brazos con moretones.
Los testimonios clave son de la propia Fabiola Yañez que declaró que “su hostigamiento y acoso psicológico era constante” lo que le impedía desarrollar una vida normal.
“Ella en una conversación, me escribe porque se había publicado en los medios las fotos de la fiesta de Olivos. Le decía que no diera bolilla a las redes sociales. Empezamos a hablar de eso y Fabiola me manda un par de fotos que me sorprendieron muchísimo. Me habla y me dice eso sobre los golpes y eso, me sorprendió muchísimo. Me mandó fotos del ojo y de los brazos”, relató María Cantero, la secretaria del ex presidente, por una conversación con Yañez de 2021.
En su defensa, Fernández argumentó enemistad con el juez para recusarlo, lo que fue rechazado. Cuestionó por qué “su morada nunca fue allanada y su celular nunca fue secuestrado”, mientras que a él sí se le secuestraron pruebas.
En cuanto a los chats, declaró que “esos chats fueron producto del odio que me guarda y que le generó la difusión de la fotografía que daba cuenta de la cena celebrada en Olivos el 14 de julio de 2020 con motivo de su cumpleaños”.
El juez dijo que las denuncias y agresiones ocurrieron «dentro de un contexto de violencia de género” y destacó la “relación asimétrica de poder que existió durante todo el vínculo sentimental”.