“El 50 por ciento de las personas hipertensas come menos de una fruta por día. Incorporar al menos dos sería lo ideal”, destacó Miguel Schiavone, cardiólogo, jefe del Servicio de Hipertensión Arterial del Hospital Británico y miembro de la Fundación Cardiológica Argentina.
Estos son los siete alimentos que según Schiavone no pueden faltar en la dieta de una persona hipertensa:
1. Frutos secos. Aportan potasio, un mineral muy beneficioso para la hipertensión incluso más que el descenso del consumo de sal porque es uno de los ingredientes que regula la presión arterial.
2. Ensalada de frutas. La variedad con mucho color es lo mejor porque aporta todos los nutrientes necesarios. Es bueno combinarlas porque así uno no se cansa de consumirlas.
3. Verduras. Pueden consumirse grilladas, al vapor, horno o crudas, mientras no se preparen empanadas o con mucho aceite, apenas una cucharada sopera de oliva extravirgen.
4. Cereales. Tales como avena, maíz o los industriales sin azúcar. Se pueden incorporar en el desayuno con yogures o leche descremados para que sea más sustancioso.
5. Carnes magras. Contrariamente a lo que se cree, las carnes magras se pueden comer tranquilamente. En lugar de prepararlas con sal, se les puede echar limón, que trae el sodio que tiene la carne al exterior.
6. Legumbres. Si son compradas en dietéticas se pueden consumir porque no tienen sales agregadas. La ingesta debe ser de un par de veces a la semana por ser muy calóricas.
7. Especias. Son una gran opción para condimentar los platos y extrañar menos la sal.
En la alimentación de una persona con hipertensión están contraindicados embutidos, quesos, aderezos, manteca y margarinas, sal y aquellos productos con sodio oculto como pastelería y confitería.