El senador nacional Carlos Caserio anunció ayer que el servicio del Ferrourbano de nuestra ciudad comenzará a prestar servicios a mediados de diciembre. Además, anticipó que el boleto costará apenas cuatro pesos. La decisión ya está, lo hace la Nación. Se contrató al personal y se lo está capacitando. Son 35 personas que van a estar trabajando cuando el tren ya esté funcionando a mediados de diciembre”, afirmó el también candidato a la Cámara Alta del Frente de Todos.
El proyecto se denomina ahora Tren Metropolitano, y contará con nueve frecuencias diarias que conectarán esta Capital con La Calera, y tres continuarán hasta Valle Hermoso, en el Valle de Punilla. Cuatro partirán de la estación Alta Córdoba y cinco desde la Mitre, en el Centro.
El servicio se prestará con seis formaciones Emepa Alerce: son coche motor con capacidad para 240 pasajeros. Los servicios que partirán desde Mitre tendrán una parada en barrio General Paz, que podría estar ubicada a la altura de donde se debe terminar el Concejo Deliberante y la que sigue la altura de calle Isabel La Católica, punto en el que coinciden con los que parten desde Alta Córdoba. Desde allí, hay apeaderos a la altura de calle Cornelio Saavedra, avenida Monseñor Pablo Cabrera, el Hospital Neonatal, Rodríguez del Busto, La Tablada (a la altura de Padre Claret), Argüello (a la altura del CPC) y Tristán Narvaja (a la altura de Bodereau y Ricardo Rojas).
Al respecto, Caserio adelantó que el costo del pasaje entre Tristán Narvaja y Mitre sería de alrededor de cuatro pesos. De esas paradas, se deben construir los apeaderos de General Paz, Isabel La Católica, Cornelio Saavedra y Monseñor Pablo Cabrera. Luego, el tren sigue hacia el noroeste: Saldán (donde también se construirá un apeadero), Dumesnil y La Calera. El tiempo previsto de viaje es de 60 minutos desde Alta Córdoba, y 70 minutos desde Mitre. Como se dijo antes, tres servicios continuarán hacia Valle Hermoso, con paradas en Casa Bamba, Casaffousth, Bialet Massé, Santa María, Cosquín, Molinari, Casa Grande y Valle Hermoso. Está previsto que antes de fin de año llegue a La Falda.
Solos
Originalmente, estaba previsto que el gobierno provincial y la Municipalidad de Córdoba también fueran parte del proyecto. Es más, el Ferrourbano fue una de las promesas de campaña del actual intendente Martín Llaryora.
A finales de 2019, se anunció un proyecto que contaba con el apoyo de la Provincia, el municipio y la Nación. Pero desde marzo de este año, las diferencias políticas entre el gobernador Juan Schiaretti y el presidente Alberto Fernández se deterioraron fuertemente. Y, ya en campaña, también se distanció Llaryora. Por eso, nunca se terminaron de firmar los convenios para la puesta en marcha del servicio.
En julio pasado, con la llegada de Rodrigo Rufeil a Ferrocarriles Argentinos, se intentó un relanzamiento, que se vio frustrado por las elecciones. Por eso, la Nación decidió avanzar por su cuenta y rebautizar al Ferrourbano como Tren Metropolitano”.
Nuevamente, habrá cambios. En el proyecto de 2019 estaban previstas 10 estaciones entre el apeadero ubicado en la rotonda de Ricardo Rojas y Manuel de Falla y la Estación Mitre, y quedaba excluida la estación Alta Córdoba. También se preveía que la Municipalidad construyera dos apeaderos.
Ahora, todo corre por cuenta de la Nación: la construcción de cinco apeaderos y la inversión de mil millones de pesos para poner en valor Mitre. Otro punto es que se planteaba una coordinación con el transporte urbano de Córdoba y que se pagara con la misma tarjeta Red Bus, y un boleto que no superara los 49,88 pesos que cuesta el viaje en ómnibus.
Llaryora sostuvo el martes pasado que habrá colaboración por parte del municipio para la implementación del tren. Es esencial que Córdoba tenga otra modalidad. Estoy dispuesto a colaborar con todo lo que haga falta, un proyecto que teníamos con ellos, lo único que importa es que el servicio inicie lo más rápido posible”, sostuvo en declaraciones periodísticas. Desde el Palacio 6 de Julio ratificaron que es voluntad de acompañar la puesta en marcha, asegurando de que no se pondrán obstáculos en su implementación.